MOSCÚ, Rusia.- El presidente ruso, Vladimir Putin, anunció un decreto para que los compradores extranjeros paguen en rublos el gas ruso a partir del 1 de abril, y dijo que, de lo contrario, los contratos se suspenderán. Es la réplica económica más fuerte de Rusia a las aplastantes sanciones por su invasión de Ucrania.
Rusia dejará de vender gas a “países inamistosos” si no le pagan con rublos“Para comprar gas natural ruso, deben abrir cuentas en rublos en bancos rusos. En estas cuentas se efectuarán los pagos por el gas entregado”, dijo Putin en un mensaje televisado El cambio busca fortalecer la soberanía rusa y se ceñirá a las obligaciones en todos los contratos, sostuvo.
Reacción de Putin: Rusia sólo aceptará pagos en rublos por el gas que le vende a Europa“Si no se realizan estos pagos, lo consideraremos un incumplimiento por parte de los compradores, con las consecuencias que conlleva. Nadie nos vende nada gratis, y nosotros tampoco vamos a hacer caridad, es decir, los contratos existentes se suspenderán”, agregó.
La necesidad de importar gas pone al país en aprietos y tiene en vilo a la producciónRusia suministra a Europa cerca de un tercio de su gas, por lo que la energía es la palanca más poderosa a disposición de Putin en su intento por responder a las duras sanciones occidentales.
Compañías y gobiernos occidentales consideraron que la medida sería una ruptura de los contratos existentes, fijados en euros o dólares.
El ministro de Economía de Francia dijo que su país y Alemania se están preparando para un posible escenario de interrupción de los flujos de gas ruso, algo que provocaría una gran crisis energética en Europa.
“Este cambio en el procedimiento de pago tiene lugar porque la UE han congelado las reservas de divisas del Banco de Rusia, en violación del derecho internacional”, dijo Putin al canciller alemán, Olaf Scholz.
Alemania, el mayor receptor de gas ruso del continente, calificó de “chantaje” el ultimátum, y respondió que los países de la Unión Europea seguirán pagando el gas ruso en euros y dólares, como lo estipulan los contratos.
El enfrentamiento tiene enormes ramificaciones. Europa quiere desprenderse de la energía rusa, pero corre el riesgo de inflar los precios del combustible. Rusia, por su parte, tiene una enorme fuente de ingresos en juego en un momento en que su economía se tambalea.
Analistas de Fitch Solutions ven difícil que se cumpla la amenaza. “Rusia tendría que interrumpir físicamente el flujo de gas a los miembros de la Unión Europea -explicaron-, lo que supondría una enorme escalada, que ni siquiera se produjo en el momento álgido de la Guerra Fría. Supondría otro gran golpe financiero para las arcas rusas”.
La invasión de Ucrania, que lleva cinco semanas, le costo la vida a miles de personas, dejo ciudades devastadas, multitudes aterrorizadas y hambrientas, escondidas en sótanos, y causo el desarraigo de una cuarta parte de los 44 millones de habitantes.
Esta semana, Moscú dijo que reduciría la ofensiva cerca de la capital, Kiev, y del norte como gesto de buena voluntad y se centraría en “liberar” la región sudoriental de Dombás. Pero los bombardeos continuaron. (Reuters)