El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) declaró la emergencia fitosanitaria hasta mayo del año que viene, a raíz de la plaga del Pulgón Amarillo del sorgo (Melanaphis sacchari). Se trata de una de las más dañinas para el cultivo de ese cereal, ya que ingiere los nutrientes que la planta necesita para su crecimiento y para su desarrollo. Así lo precisaron las autoridades del ente fitozoosanitario.
Mediante esta decisión se autoriza a los productores a la utilización, con carácter excepcional y provisorio, de algunos ingredientes activos para su control. Según se comunicó oficialmente, esto se debe a que, por el momento y a raíz de la reciente aparición de la plaga en este cultivo, no hay productos autorizados por el Senasa.
La decisión fue tomada por el Senasa teniendo en cuenta la necesidad manifestada durante un encuentro con agrupaciones de productores, de la que participó también la Federación Argentina de Ingeniería Agronómica (Fadia). En la ocasión se plantearon alternativas de control.
En ese marco, se persigue el objetivo de poder dar una respuesta rápida y eficaz a la problemática que la plaga está causando en zonas productivas del cultivo de sorgo de las provincias de Chaco, de Santiago del Estero, de Santa Fe, de Entre Ríos, de Salta, de San Luis, de Córdoba, de Buenos Aires y de La Pampa.
Desde la aparición de esta plaga en el sorgo en la Argentina, el Senasa y el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) conformaron un equipo de trabajo articulado e interdisciplinario, que apunta a conocer más sobre el pulgón amarillo y que permite aumentar las acciones de manejo y de control.
La Comisión de Fitosanitarios de la Fadia, con la activa participación del Colegio de Ingenieros Agrónomos Provincia de Córdoba (Ciapc), plantearon a las autoridades del Senasa el tema de control del Pulgón Amarillo del sorgo. Entonces, debido al reclamo de profesionales de todo el país y a que no existen productos registrados para esta plaga se emitió la resolución, que autoriza siete productos para el control. La norma regirá aproximadamente por un año.
Finalmente, los técnicos de los organismos que trabajan en este tema destacaron que el monitoreo es importante para detectar a tiempo la posible presencia de la plaga y, a partir de allí, poder realizar los controles correspondientes en caso de que sea necesario.