Espero que las autoridades comunales de Los Nogales realicen las tareas de mantenimiento de la caminería interlocalidades, así como garanticen la gestión eficiente de los residuos. El estado calamitoso de la caminería rural que une los Nogales con las Cañitas y la Granja, así como la nula iluminación rural, los pastizales al borde de los caminos que hacen crecer la inseguridad, han transformado una zona que podría ser pujante en inversiones inmobiliarias e industriales en una zona insegura por la nula gestión provincial y comunal de mantenimiento y prevención de la seguridad, todo lo cual exige necesariamente obras de limpieza de los pastizales y basurales (sobre todo en la zona de Las Cañitas hacia la Granja), iluminación rural, mantenimiento de la caminería, enripiado, etc. Los caminos parecen zonas de entrenamiento de un rally antes que caminos propicios para la inversión y desarrollo y se han transformado en circuitos de malvivientes de toda calaña que se desplazan en motos y vehículos, amparados en la desidia y el abandono de la obra pública comunal. Así resulta difícil imaginar que haya inversores genuinos. Espero que estas líneas sirvan para la reflexión de las autoridades de la Provincia y la comuna.
Saúl Alberto Ibáñez
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