A raíz de la baja de contagios y muertes por coronavirus, los países buscan volver a esa vieja normalidad que quedó interrumpida en marzo de 2020. Así, Francia anunció este jueves que a partir del 14 de marzo el pase sanitario quedará suspendido y que el uso de barbijo dejará de ser obligatorio, excepto en los transportes y algunos establecimientos.

"La situación mejora gracias a nuestros esfuerzos colectivos, gracias a las medidas que hemos tomado se dan las condiciones para una nueva fase de flexibilización de las medidas", afirmó el primer ministro francés, Jean Castex, en la cadena TF1.

Y añadió: "A partir del lunes 14 de marzo, suspenderemos la aplicación del pase de vacunación en todos los lugares en los que se aplica".

La ola de contagios de coronavirus de este invierno lleva varias semanas en declive. El número de contagios acumulados en una semana ascendía el miércoles a 53.152, mientras que una semana antes esa cifra era de 70.000.

La presión también se reduce en los hospitales, donde hay 2.329 personas en cuidados intensivos.

Hasta ahora, el Gobierno había puesto como condición que el número de enfermos ingresados en cuidados intensivos fuese inferior a 1.500 a mediados de marzo para levantar total o parcialmente la obligatoriedad del pase de vacunación, en vigor desde el 24 de enero.

Sin embargo, dos medidas seguirán estando vigentes: el barbijo seguirá siendo obligatorio en el transporte público y se seguirá exigiendo el pasaporte sanitario en "establecimientos sanitarios, residencias de ancianos, establecimientos para personas con discapacidad que sean especialmente vulnerables".

Además, el pasaporte de vacunación seguirá siendo obligatorio para el personal sanitario, matizó el primer ministro.