Luis Alejandro Ruiz

Estaba disfrutando de sus vacaciones cuando el lunes se dio cuenta de que le faltaba el número 35. El martes completó el cupón. “A mi mujer la desperté y le conté. No entendía nada. Nos abrazamos y nos emocionamos. Es la primera vez que ganamos algo tan grande”, dice Ruiz. El dinero será destinado a seguir con el proyecto de tener su casa propia.

Tomasa Elvira Villafañe

Tiene 74 años y es jubilada. Dice que nunca perdió la esperanza de ganar algún día el premio. Y esa ilusión se concretó llegó el martes. “Lloré de alegría y de emoción. Gloria a Dios si es un premio compartido. Mucha gente lo necesita”, manifiesta Villafañe. Relata a LA GACETA que tiene prioridad arreglar su casa, sobre todo remodelar el baño.

Silvia Villagrán

“Dios sabe dónde está la necesidad y obra de esta manera”, cuenta emocionada Villagrán. Tiene 46 años, cinco hijos y trabaja en una estación de servicio. “Jamás pensé que podía ganar. Controlé varias veces. Todos dijeron que me lo merecía. Ahora voy a comprar, con el premio, todos los elementos escolares para mis tres hijas”, enfatiza.

Sonia Saracho

Es docente. “No me lo esperaba. Vivimos tiempos difíciles y esto es muy lindo. Además, me encanta que sea compartido entre varios, porque somos muchos los ganadores”, indica Saracho. Aún no tiene pensado en que invertirá el dinero. “Me sorprendió el azar en el momento justo. Estoy agradecida”, finaliza.

Mario Antonio Rojas

Cuando terminó su turno de trabajo en un restobar, controló la grilla. “Es algo emocionante, es algo que todos queremos ganar. No lo creía, mis compañeros de trabajo y mi hija, que estaba conmigo, controlamos varias veces el cupón”, aclara Rojas. Con el dinero pagará deudas y hará algunos regalos a sus hijas. “Seguiré participando, ahora creemos más”, indica.

Romina Alejandra Toledo

A LA GACETA le cuenta que es la primera vez que gana algo: “siempre era controlar por controlar la grilla; pero estaba presente la fe”. Hace meses que tienen parada la construcción de su casa. El premio irá destinado a reactivar las obras y avanzar en ese proyecto familiar. “Nos llegó la suerte y nos sorprendió a todos”, comenta conmovida Toledo.

Gabriela Beatriz Argañaraz

Es ama de casa, vive con su marido y con sus cuatro hijos adolescentes. “Cuando vi que había ganado, pegué un grito de emoción y se despertaron mis hijos, preocupados. Les pedí que me controlen otra vez los números. Y ahí dije: vamos ya a LA GACETA”, relata Argañaraz. Tiene pensado pagar deudas e invertir en la fiesta de 15 años de una de sus hijas.