A 10 años de la tragedia de Once, los condenados en un primer juicio oral gozan de libertad condicional o prisión domiciliaria, en tanto la Corte Suprema de Justicia tiene pendiente de resolución un recurso de queja de la defensa del ex ministro de Planificación Federal Julio De Vido.
El primer juicio se hizo contra el motorman del tren Marcos Córdoba, los entonces directivos de la empresa concesionaria Trenes de Buenos Aires (TBA) y los ex secretarios de Transporte Ricardo Jaime y Juan Pablo Schiavi. Este debate oral en 2015 derivó en condenas a prisión para 21 personas que quedaron firmes en la Corte Suprema, salvo la de Jaime.
El ex funcionario había sido condenado a siete años de cárcel por el Tribunal Oral Federal 2 pero al revisar la sentencia, la Cámara Federal de Casación le subió la pena a ocho años, por lo cual la Corte ordenó que otros jueces del máximo tribunal penal del país revisen esa decisión en garantía del llamado derecho al "doble conforme". Hasta que esto ocurra, Jaime recuperó la libertad pero exclusivamente en esta causa, ya que en la actualidad está detenido y sometido a juicio en el marco de otras causas.
Los condenados en el juicio oral iniciado en 2015 se presentaron para quedar presos el 5 octubre de 2018 en los Tribunales Federales de Retiro, una vez que Casación revisó sus condenas, las redujo y rechazó luego un recurso extraordinario ante la Corte. Salvo en el caso de Jaime, el máximo tribunal del país dejó firme las penas el 24 de septiembre de 2020, al rechazar varios recursos de queja.
El 31 de diciembre pasado quedó en libertad condicional el ex presidente de TBA al momento del choque, Carlo Michelle Ferrari, quien había sido condenado a 5 años de prisión. Al igual que otros condenados, el ex directivo de TBA tenía ya concedido el beneficio de la prisión domiciliaria para cumplir penas que vencen entre 2023 y 2024.
En otro de los casos, Jorge Álvarez, también directivo de la concesionaria al momento de la tragedia, quien había sido condenado a seis años de prisión, recibió la libertad condicional el 9 de diciembre último y salió de la cárcel de Ezeiza, donde cumplía la condena que vencerá el 4 de octubre de 2024.
Schiavi, por su parte, salió en libertad condicional el 15 de noviembre pasado, al cumplir dos tercios de su condena a cinco años y seis meses de prisión. La pena impuesta por la Corte Suprema vencerá el 4 de abril de 2024.
En cuanto al máximo responsable de la empresa TBA, Claudio Cirigliano, está con condena firme a 7 años de cárcel y tiene arresto domiciliario desde abril de 2021 por cuestiones de salud. Cirigliano dejó en ese mes la cárcel de Ezeiza y quedó alojado en su casa de la Ciudad de Buenos Aires con tobillera electrónica, con su esposa como garante.
En octubre de 2018, en un segundo juicio por la tragedia, el entonces ministro de Planificación Federal Julio De Vido fue condenado a cinco años y ocho meses de prisión. Este juicio lo realizó el Tribunal Oral Federal (TOF) 4, que lo condenó por "administración fraudulenta" en un veredicto que está confirmado en la Cámara Federal de Casación pero con un recurso de queja a estudio de la Corte Suprema.