El FMI analizará esta semana los resultados de una evaluación interna del programa de facilidades extendidas que fue suscripto por el ex presidente Mauricio Macri, que se encuentra suspendido desde los últimos meses de 2019. De esta forma, antes de que el directorio discuta el nuevo plan que la Argentina suscribirá para reprogramar los vencimientos por U$S 45.000 millones de la deuda heredada, el Fondo analizará las lecciones que dejó el acuerdo anterior y eventuales errores que hicieron fracasar el programa. El gobierno de Macri contrajo en 2018 una deuda por un monto total de U$S 57.100 millones, aceptando una mayor tasa de interés por un monto que superaba su cuota dentro del FMI. La evaluación ex-post se concibió como un mecanismo para trazar lecciones después de que se completa un acuerdo de acceso excepcional, como el préstamo que suscribió Macri, que iba a ser de U$S 57.000 y finalmente fueron otorgados cerca de U$S 45.000 millones. El presidente, Alberto Fernández, pidió esta revisión en el marco de las negociaciones por el nuevo acuerdo.