La música de Ástor Piazzolla suena cada vez con más fuerza en todo el mundo, a 100 años de su nacimiento. Hoy, a las 21, en el Centro Cultural Virla (25 de Mayo 265) Florencia Masucci en piano, Gabriela Canaviri en chelo y los violinistas Emanuel Cardozo y Genaro Sánchez interpretarán algunas de sus obras más representativas.
La música de cámara de todos los estilos, pero sobre todo clásica y romántica, ha reunido en varios conciertos desde 2013 al dúo de violín y piano Sánchez-Masucci y al trío violín, chelo y piano con Canaviri.
Ahora, abordar el repertorio Piazzolla requirió agrandar la formación musical, por ello participarán como invitados Jesús Canaviri en bandoneón, Jeremías Humacata en violín, Marina Jara en viola y Jorge Girbau en contrabajo.
Todos son músicos tucumanos de larga trayectoria en las orquestas Estable de la Provincia y Sinfonica de la UNT, además de ser docentes del Instituto Superioe de Música de la UNT (Ismunt) y el Conservatorio Provincial de Música.
“El repertorio fue surgiendo a medida que conseguimos partituras. Encontrar obras de Piazzolla no es tan fácil, porque como todo compositor contemporáneo, los derechos están en manos de sus descendientes. Primero encontramos tríos de las Estaciones Porteñas, así que nos juntamos piano, chelo y violín”, cuenta Masucci.
“Al mismo tiempo ellos, como músicos de la Orquesta Estable fueron sumando otro tipo de repertorio, como ‘Café 1930’, ‘La historia del tango’ y ‘La bicicleta’, que son arreglos para cuerdas”, agrega la pianista, que interpretará en arreglo para piano solo “Oblivion”. “Se trata de un arreglo de Saúl Constantino, que conseguí en Buenos Aires a traves de mi maestra, Natalia González Figueroa, una pianista muy importante que hace mucha música argentina”, explica.
También tocarán “Escualo” para bandoneón, violín, piano, chelo y contrabajo, entre otras.
Concierto de amigos
El concierto de hoy comenzó a gestarse en pandemia, pero se decidió el 20 de julio, “cuando en un concierto de amigos empezamos a juntar las obras”. “Es muy emocionante además poder volver al escenario, porque en 2019 tocamos por última vez en el Virla. Lo que sí hicimos en pandemia es mucha música en casa, y a través de nuestro canal en YouTube, le alegramos la vida a personas que estaban solas y aisladas. Era cuestión de no perder el contacto con la gente, y con la música dar un mensaje esperanzador”, recuerda Masucci.
La artista destaca cuánto la gratifica abordar el repertorio Piazzolla por primera vez, en su caso, a diferencia de los demás, como músicos de la orquesta, y resalta la presencia esencial de Jesús Canaviri en bandoneón, que como integrante del Quinteto El Brete aporta su bagaje tanguero.
Mucho sentimiento
“La música de Piazzolla está cargada de sensibilidad, de fuerza; es muy emotiva y melancólica. Tiene el poder de transmitir mucho sentimiento en una pieza de no más de cinco minutos. Es una música con muchos acentos, contrastes y colores. La expresión y la energía que uno pone al tocar dependen no sólo de cada nota correcta sino también de lo que se conoce del compositor. Por eso es tan agradable interpretarlo, y como argentinos de alguna forma lo llevamos adentro -afirma el violinista Sánchez-. Si toco el ‘Invierno porteño’, en mi mente aparecen indefectiblemente imágenes de Buenos Aires”.