“StoryLab SA confirma que la salud de la Sra. Mirtha Legrand continúa evolucionando favorablemente, por el momento permanecerá internada en la unidad coronaria del Sanatorio Mater Dei en compañía de su familia. La conductora envía sus agradecimientos y cariño a todas las personas que le expresaron su afecto y preocupación. Se continuará comunicando oportunamente, conforme a las posibles novedades y en coordinación con sus médicos y el Sanatorio”. Este es el comunicado de prensa (única información oficial) que ayer al mediodía difundió la productora de Nacho Viale, acerca del estado de salud de su célebre abuela.
El jueves a la tarde se supo que la actriz y conductora había sido intervenida quirúrgicamente tras haber sufrido un cuadro coronario. Legrand se sintió mal en su casa, y fue internada para realizarle estudios. A través de una cinecoronariografía se le detectó una obstrucción coronaria, por lo cual se resolvió la colocación de dos stents.
La conductora había regresado circunstancialmente a la pantalla hace poco más de un mes para ocupar su lugar al frente de su tradicional programa de almuerzos y cenas. Tenía planeado retomar los almuerzos cuando las temperaturas primaverales volvieran a Buenos Aires.
Tensión y memes
La noticia de la internación de la diva, si bien al mediodía de ayer tenía buen pronóstico, puso en tensión redacciones, portales y redes sociales. Y como era de esperar, explotó la próspera industria nacional de la ironía a través de los memes.
No es para menos tanto revuelo. Se trata de la salud de la señora Legrand, cuya trayectoria como actriz y conductora desde sus 14 años, cuando debutó en el cine, hasta sus actuales 94 años, desarrollada de manera ininterrumpida, construyeron su figura emblemática, única en el ambiente del espectáculo nacional.
En este ámbito Legrand es la estrella número uno, junto a Susana Giménez, y está considerada una de las mujeres más importantes de la televisión en Latinoamérica.
De Villa Cañás
Rosa María Juana Martínez Suárez, su verdadero nombre, nació el 23 de febrero de 1927 en Villa Cañás (Santa Fe), lugar que siempre recuerda la diva
Sus padres, inmigrantes españoles, se separaron. La madre se fue a Rosario y allí Rosa y su hermana gemela, María Aurelia (conocida como Goldy), tomaron cursos en el Teatro Municipal. En 1936 emigraron a Buenos Aires, al barrio de La Paternal, donde vivieron en la pobreza, hasta que en 1939 se ofreció a las hermanas una pequeña parte en “Hay que educar a Niní”, película protagonizada por Niní Marshall,
En 1941 las hermanas Martínez actuaron en “Soñar no cuesta nada”, dirigidas por el gran Luis César Amadori. Pero su primer papel importante llegaría en “Los martes, orquídeas”. Ese año adoptaron los nombres Mirtha y Silvia Legrand.
Por el éxito de “Los martes...” Mirtha firmó un contrato de cinco años con los prestigiosos Lumiton Studios. En esa época participó en “Safo, historia de una pasión”, la primera película argentina a la que se prohibió la entrada de menores. En el mismo período, Mirtha y Silvia trabajaron en el show “El club de la amistad” que se emitía por Radio Splendid.
En 1945, a los 19 años, Mirtha conoció al productor de cine francés Daniel Tinayre, de 36, y se casaron el 18 de mayo de 1946.
La joven actriz era ya tan conocida que “Radiolandia”, la revista del espectáculo, se aseguró los derechos de la boda. Con Tinayre tuvo dos hijos, Marcela Tinayre y Daniel Jr. (falleció a los 50 años, en 1999). Después le llegarían los trabajos más notables, “La vendedora de fantasías” (1950), coordinada por su esposo. En 1955 apareció en “El amor nunca muere” junto a Tita Merello y Zully Moreno. En 1957 hizo su primer pasaje al teatro, y llevó a la televisión en Canal 7 un año después con los proyectos “M ama a M” y “Los enredos de Mariana”. En 1961 y 1962 filmó “Bajo un mismo rostro”, y en 1965 “Con gusto a rabia” fue la última película en la que actuó.
Pero nada igualaría en popularidad a lo que ocurrió a partir de 1968, cuando debutó con su show televisivo, que se convirtió en el programa de mayor duración en la TV argentina. “Almorzando con Mirtha Legrand” reunió en su mesa a personalidades destacadas en distintos ámbitos, desde estrellas del espectáculo hasta dirigentes políticos.
En 2013 el formato se transformó en semanal e incorporó el horario de la cena los sábados. Como anfitriona, detrás de las joyas, la alta costura y el carisma, “La Chiqui” impuso su agudeza y su desparpajo periodístico. Su mejoría augura que la diva no cruza los cubiertos.
La reciente pérdida de sus hermanos José y Goldy
Mirtha Legrand sufrió la partida de su hermana gemela Goldy el 1 de mayo de 2020, de muerte natural y sin síntoma alguno. El 17 de agosto de 2019 había muerto el hermano mayor, José Martínez Suárez, reconocido director de cine, a los 93 años.
Siempre en el recuerdo: su matrimonio con Daniel Tinayre
El 18 de mayo de 1946, en la Iglesia San Martín de Tours, Mirtha dijo “sí quiero” a Daniel Tinayre. Como siempre, la diva lo recordó este año posteando una foto en blanco y negro con una descripción que conmemora aquel momento, 75 años después.
De emblema de la comedia blanca al mejor cine dramático
En la época de oro del cine argentino la diva se convirtió en un emblema de las comedias blancas. Luego incursionó con éxito en el género dramático, en varios títulos. En 1959 fue elogiada por su rol en “En la ardiente oscuridad”. Se retiró del cine en 1965.
Más de 50 años almorzando y la vuelta a la ficción televisiva
En 1968, inició “Almorzando con las estrellas”, por Canal 9. Poco después el ciclo fue rebautizado a “Almorzando con Mirtha Legrand”, consolidando su protagonismo. En algunos cortos períodos el programa dejó de emitirse. En 2012 protagonizó “La dueña” (foto) que significó su retorno a la ficción televisiva después de 46 años.