Las declaraciones vertidas por Claudio Morata en contra de la ex concejala Sandra Manzone no cayeron bien y provocaron una dura respuesta desde la Coalición Cívica ARI Tucumán. El pastor de la Iglesia Vida y Salvación de las Naciones ubicada en Villa 9 de Julio de San Miguel de Tucumán había manifestado –en una nota publicada ayer en LA GACETA- que la hoy precandidata a senadora de la lista Cambiemos Juntos lo sacó del Concejo con el auxilio de la “clase política”. A raíz de esto, Antonio Eduardo Riba, en representación del partido, salió a defender la imagen de la dirigente política con un comunicado que se titula: “La mentira uno 10 años después a Beatriz Ávila y Morata”.

En el partido cuestionaron la participación de la diputada nacional en el último debate televisado de precandidatos que realizó este medio, al asegurar que apeló a “falsedades” para atacar a Manzone. Pero también destacaron que el tema que intentó reflotar el pastor Morata “fue definitivamente saldado por el grito de Verdad de las urnas, a la vista de toda una sociedad que siguió día a día la disputa por la banca N° 18 del Concejo capitalino, que tomó inclusive estado público nacional, verdad que con sus letrados intentó acallar con todo tipo de descalificaciones, injurias, amenazas a integridad personal así como chicanas y argucias legales para impedir la preservación, apertura y recuento de votos histórica - por casi inédita en el país - y que muy a su pesar pudo realizarse finalmente los días 6 y 7 de diciembre de 2011, consagrando el resultado que parece ser el único que no registra”.