Este miércoles murió un adolescente durante un entrenamiento en Lince. Tenía 15 años, había ido con un amigo por primera vez a jugar Rugby. Llevaba pocos minutos en el club y se desvaneció mientras hacía la entrada en calor.
El representante legal de Lince sostuvo además que T.A. había llegado al entrenamiento acompañando a un amigo. El papá de éste último lo llevó en un vehículo particular hasta el Hospital Angel Padilla, "debido a la gravedad" de la situación. "Cuando llegó al hospital se le hizo la reanimación cardiopulmonar (RCP), pero aparentemente el joven sufrió muerte súbita. Era paciente sin antecedentes patológicos conocidos", comentó la directora del Padilla, Olga Fernandéz.
En Lince confirmaron que el menor falleció en su primer entrenamientoEsta muerte conmocionó a los tucumanos. ¿Se podría haber evitado? ¿Qué se hizo mal? ¿Se puede repetir?
Algunas respuestas a estas preguntas las dio en Panorama Tucumano el doctor Roque González, presidente de la sociedad tucumana de medicina del deporte y secretario de la Asociación de cardiología.
González afirmó que algunos de estos casos son evitables. "Habría que cargar las pilas, en los casos que uno podría detectar", dijo; pero agregó: "aún haciendo todos los deberes y cumpliendo con las recomendaciones (tanto los deportistas como las instituciones) aun así esto puede pasar", dijo.
Un adolescente de 15 años se desvaneció mientras entrenaba en Lince y murióNo son decesos frecuentes. El especialista dijo que se dan una o dos muertes subitas anuales, cada 100.000 habitantes, menores de 35 años.
Esto puede pasar más en los deportistas recreacionales, esos que no entrenan con objetivos de competencia claros y, de manera amateur, solo hacen alguna actividad física el fin de semana. "El guerrero de fin de semana -dijo- a ves acompaña a otros que están acostumbrados a otro ritmo de exigencia y eso genera un riesgo de tener un evento cardiovascular".
El riesgo para los deportistas amateur es mayor. Pero también le puede pasar a un profesional. En este sentido, el cardiólogo tucumano recordó el caso de Christian Eriksen, el futbolista danés que sufrió una muerte súbita durante un partido de la Eurocopa.
González dijo que pese a todos los estudios previos, no se pudo detectar ninguna anomalía en Christian Eriksen y sin embargo tuvo evento cardiovascular. Sobre este mismo caso, el profesional resaltó que gracias a la reacción con un desfibrilador lograron salvarle la vida.
"En esos eventos puede cambiarse el destino si tenemos la suerte de presenciar y si sabemos qué hacer y si tenemos los elementos indispensables para salvar la vida", dijo. Y acotó que todos deberíamos recibir una fuerte capacitación sobre cómo reaccionar ante un evento de este tipo.
En cuanto a la prevensión, dijo que es una de las herramientas importante y que muchas veces los profesionales médicos deben luchas contra padres que sólo quieren un certificado médico y tratan de evitar que a sus hijos les hagan exámenes.
"Los padres deben entender que no pueden ir a pedir un certificado médico sin hacer los exámenes... me dicen: 'mi hijo juega, es un crack, no tiene nada' y se ofenden porque no quieren hacer los estudios... no entienden que ese contratiempo es una gran ayuda y puede ser decisivo", dijo.
Por otra parte, dijo que en muchas personas el coronavirus agravó los problemas cardíacos o los generó. Sugirió que cualquier persona que haya sufrido covid-19, más si estuvo grave, debería hacerse un estudio antes de volver a practicar deporte, porque puede haberse generado un problema cardíaco.
"Algunas muertes son inevitables", dijo el doctor.
Concretamente sobre la muerte del joven en Lince, González dijo que "es una tragedia que se va a repetir". "Aun cuando hagamos todos los deberes, se va a repetir, porque no podemos detectar todos los posibles candidatos a la muerte súbita, ni siquiera los estudios más profundos dan una certeza", dijo.
Asimismo, dijo, sobre el caso de Lince, que lo asustó la caza de brujas que se armó. "Pueden haber responsables, pero muchas veces son cuestiones que tienen una carga de fatalidad muy grande. Hoy hay que plantear qué hay qué hacer para que nos agarre mejor preparados para la próxima", concluyó.