Había transcurrido prácticamente todo el acto del lanzamiento de la versión tucumana del Frente de Todos sin alusiones al sector político  que lidera el vicegobernador, Osvaldo Jaldo. Tanto silencio, en el momento en que se constituía formalmente el espacio que competirá en los comicios nacionales de septiembre (Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias) y en noviembre (generales), llamaba la atención y espesaba la tensión.

Hasta que en los últimos segundos antes de la clausura del evento el gobernador, Juan Manzur, lanzó el dardo dirigido a su ex socio: "vamos a seguir firmes, respetando la conducción con los códigos del peronismo, con los compromisos del peronismo, con las lealtades del peronismo; vamos a seguir firmes, respetando la coducción nacional del peronismo. Por eso, el peronismo tucumano es orgánico; el peronismo tucumano es respetuoso".

Luego de eso, la multitud de dirigentes y de militantes que se había reunido en el Hipódromo entonó la famosa marcha peronista.

El acto sirvió de presentación formal de la constitución del Frente de Todos, alianza que en Tucumán integrarán las fuerzas: Tucumán Innovador, Partido del Trabajo y la Equidad (Parte), Frente Renovador, Partido de la Victoria, Partido Solidario, Tucumán Avanza y Kolina.

El evento contó con la participación remota del ministro del Interior de la Nación, Eduardo de Pedro, y del presidente, Alberto Fernández. Ninguno de los dos, sin embargo, mencionó o aludió al quiebre en el oficialismo de la provincia o al vicegobernador.

"Estamos viviendo un momento difícil; sin embargo acá está gran parte de la estructura territorial y de la dirigencia política del peronismo. Pero también están compañeros y amigos de otros partidos, que hoy han decidido firmar este frente para acompañarnos", dijo Manzur en su discurso inicial.

Resatló luego el carácter frentista histórico del peronismo. "En plena pandemia vamos a vivir un acto de la democracia, en el cual, una vez más, y después de casi 70 años desde sus comienzos, el peronismo seguirá constituyendo frentes.

Luego, avisó a la concurencia que había invitado a De Pedro y al Presidente. "Como presidente del peronismo tucumano les pregunté si nos querían acompañar. 'Sí compañeros, ahí vamos a estar, con todo el peronismo tucumano', respondieron", dijo Manzur.

El ministro manifestó el orgullo que sentía de ver un "líder" como Manzur, organizando espacios de militancia "plurales". "Comenzamos un proceso electoral donde está en juego la disyuntiva de una Argentina federal, para todos; donde está en juego la defensa de la industria nacional, del comercio; está en juego la educación y la salud públicas. De un lado está un Gobierno que tiene como objetivo generar felicidad a nuestro pueblo; del otro lado, la oposición histórica a los Gobiernos peronistas, que ya demostró en los últimos cuatro años su plan de gobierno: utilizar el Estado para hacer un plan de negocios de los intereses que solo enriquecen a unos pocos", dijo De Pedro.

El Presidente, en tanto, destacó las dificultades que encontró cuando accedió al Gobierno. "Cuando la pandemia cayó sobre nosotros debimos poner en pie un Estado que estaba virtualmente desarmado. Pero nunca olvidamos a los más necesitados, porque ellos son a quienes representamos nosotros", dijo.

Luego, para cerrar, Manzur volvió a tomar el micrófono. En especial, se dedicó a arengar a la tropa. "Vamos a someternos al voto popular. Y estoy seguro de que el septiembre y en noviembre el peronismo, con el Frente de Todos, va a ganar, y vamos a asegurar este proyecto político de la Argentina con igualdad de oportunidades. Porque eso es lo que queremos", dijo el gobernador.

Y luego le avisó al Presidente que el espacio que lidera se encolumnará detrás de él. "Desde el interior, desde el norte, desde Tucumán vamos a decir 'aquí estamos, de pie, querido Presidente'; y lo vamos a ayudar, con toda nuestra fuerza", afirmó. Y tras esas palabras, lanzó la chicana al jaldismo, mencionada renglones arriba.