El neerlandés Max Verstappen se consagró en el Gran Premio de Mónaco y desplazó al británico Lewis Hamilton de la punta del campeonato con cuatro puntos de ventaja. Además de un manejo impecable, el piloto de 23 años aprovechó dos situaciones que se dirimieron entre lo trágico y lo cómico en la quinta fecha.
Primero, la deserción de Charles Leclerc en la vuelta de prueba. El local largaba en punta tras haber sido el más rápido en la clasificación. Pero su Ferrari sufrió un desperfecto en uno de los palieres atribuible al accidente que protagonizó en la tanda clasificatoria del jueves. Lo curioso es que el equipo italiano había hecho todas las revisiones y le había garantizado a Leclerc que el auto era competitivo. Verstappen sacó rédito de tener despejado el frente y en la largada hizo la maniobra justa para bloquear a Valtteri Bottas. Precisamente el finlandés fue el protagonista del otro hecho particular: una tuerca atascada en el eje del neumático delantero derecho del Mercedes Benz en la parada en boxes determinó su abandono. Hasta ahí, Bottas era el único que le generaba inconvenientes a Verstappen. La frustración de Ferrari, en tanto, quedó compensada con el segundo puesto del español Carlos Sainz Jr. El tercer lugar fue para el británico Lando Norris. Hamilton, en el podio en las últimas 12 carreras, completó una discreta actuación en Mónaco con un séptimo lugar que le significó la pérdida de la cima.