Hoy, como todos los lunes, se reúnen las diferentes áreas de la cartera de Salud para evaluar el cuadro de situación. Esto ocurre en Tucumán y también en el Área Metropolitana de Buenos Aires. El nivel de contagio sigue en alza y genera preocupación.
En Buenos Aires se habla de tomar nuevas medidas restrictivas para frenar el contagio en plena pandemia. En Tucumán, se analizará los índices de los últimos días. "Los indicadores aumentaron", dijo Gustavo Costilla Campero, vicepresidente de la Sociedad Argentina de Infectología y jefe de ese servicio en el hospital Padilla. "Aumentaron los indicadores de internación y aumentaron los indicadores de testeos positivos", advirtió.
Evaluación de la situación
En las habituales reuniones de los lunes se analizan los comportamientos respecto de si la gente cambió en algo sus conductas, si se autocuidó y si asumió que la situación es grave. "La situación es complicada -resaltó Costilla Campero-, y se la está conteniendo con mucho esfuerzo".
Respecto de la variante Manaos, el infectólogo precisó que está claro que en Buenos Aires es más contagiosa y presenta más afectación en las personas jóvenes. "Hay una falta de percepción de riesgo de la población. Es como tener un familiar enfermo y no querer decirle a ese familiar que su cuadro es grave", señaló.
Adherencia de la gente
Costilla Campero dijo que si se toman nuevas medidas de restricción como parece que hará Buenos Aires, lo importante es que la gente tenga adherencia. "Incumplirlas, no sirve, porque solo quedan en una formulación de desos y nada más. No hablo de cumplimiento, prefiero hablar de adherencia de la gente, porque eso implica una participación de la propia persona. Cumplimiento suena a una orden; en cambio adherencia es diferente. Es como el paciente que dice: 'me va a retar el médico porque no tomé los medicamentos'. Pero en realidad, no es el reto del médico, es la actitud del paciente frente al tratamiento. Que haya más restricciones, pero que la gente no cumpla, no sirve de nada", remarcó.