El Senado aprobó anoche, tras cinco horas de debate, los cambios en el Impuesto a las Ganancias y el Monotributo. Se espera que el nuevo régimen, retroactivo al 1 de enero, alcance a 1,3 millón de trabajadores en los salarios de abril una vez que sea publicado en el Boletín Oficial. La ley exime del pago del impuesto a trabajadores con ingresos de hasta $ 150.000 y a jubilados que cobren hasta ocho haberes mínimos.
Los puntos centrales del proyecto de GananciasLa iniciativa fue aprobada anoche a las 22 con 66 votos positivos y una abstención. Si bien el interbloque de Juntos por el Cambio (JxC) apoyó el esquema propuesto, varios senadores del espacio criticaron una serie de aspectos. Además de señalar algunas particularidades técnicas y remarcar que la ley sólo modificará el piso y no el resto de las escalas, los opositores calificaron el texto de “parche que no abarca la realidad que vive hoy la clase media en el país”.
Ganancias: más de 30.000 tucumanos beneficiadosEl proyecto ingresó al Congreso en febrero bajo propuesta de Sergio Massa, presidente de la Cámara Baja. “El proyecto rompió la grieta”, declaró a fines de marzo luego de que los diputados dieran media sanción a la norma. Sin embargo, en la sesión de ayer abundaron las rencillas entre oficialistas y opositores por el manejo de la política económica en crisis.
Cruces entre tucumanas
Durante su alocución, la senadora tucumana Beatriz Mirkin (Frente de Todos -FdT-) reconoció estar “intranquila” ya que le resultaba “muy difícil” abordar el tema en debate. “Intenté hoy entender totalmente la ley de Ganancias que nos rige, y obviamente necesito un curso de cinco años. O tal vez otro mandato”, se sinceró. Y, tras repasar las modificaciones en el nuevo mínimo no imponible, interpretó: “lo que entiendo perfectamente es que es extraordinaria la diferencia en este proyecto. Moverá a la clase media; en Tucumán ya no pagarán Ganancias 42.000 personas”.
“El precio de los alimentos no lo da la inflación; lo dan unos pocos pícaros dueños del mercado”, acusó Mirkin ante las críticas opositoras y consideró que numerosos contadores “meten el perro” en sus labores impositivas.
La réplica directa vino media hora después de la mano de Silvia Elías de Pérez (JxC). Visiblemente enfadada, negó la incriminación y remarcó que como contadora comprendía “perfectamente” el tema en discusión. Luego de defender la gestión de Mauricio Macri “por bajar los impuestos” y reprender las gestiones económicas del kirchnerismo, la radical aclaró que apoyarían el proyecto “a pesar de no ser bueno”.
“Es complicado y no es fácil de interpretar. Es una ley enredada que puede dar lugar a judicializaciones. Apoyamos el proyecto porque baja la presión tributaria, pero tiene errores que podrían haberse subsanado”, expresó Elías de Pérez. Sus pares opositores, además, alertaron por la el costo fiscal de la norma aprobada y su impacto en la coparticipación.