En el ambiente de la política se conoce que los gestos dicen mucho más que las palabras. Y en el acto de asunción de autoridades de la Defensoría del Pueblo hubo un importante mensaje de respaldo legislativo hacia el flamante ombudsman, Eduardo “Lalo” Cobos, y sus adjuntos, Marcelo Caponio y Emilia Saab. Una docena de parlamentarios afines al vicegobernador Osvaldo Jaldo, entre ellos Regino Amado, ayer a cargo del Poder Ejecutivo, y uno de la oposición, participaron de la ceremonia.
Aunque Cobos intentó con su discurso enfocarse solamente en su nueva tarea, trazar los lineamientos de trabajo y remarcar las prioridades de su oficina, la interna fluyó por los pasillos de la sede de Balcarce primera cuadra. Y hay quienes hicieron sus propias lecturas por la designación del abogado Caponio (ex subsecretario del Plan Norte Grande) y de la contadora Saab (sobrina del secretario general de la UNT José Hugo Saab).
Al respecto, el ingeniero oriundo de Lastenia recalcó que él tiene la facultad como ombudsman de elegir a los defensores adjuntos. “Lo que haga cada uno de ellos va a depender de lo que pienso. Y yo pienso que vamos a salir a defender a la gente independientemente de color político”, resaltó en rueda de prensa.
De la ceremonia participaron el prosecretario de la Legislatura, Alejandro Martínez; los legisladores jaldistas Tulio Caponio, Daniel Herrera, Carlos Gómez, Dante Loza, Daniel Deiana, Graciela Gutiérrez, Gonzalo Monteros, Javier Morof, Pablo Alfaro, Raúl Ferrazzano y Amado; el parlamentario radical José Ricardo Ascárate (que votó por Cobos en el recinto); y Maia Martínez, quien en la sesión del jueves asumirá la banca que dejó vacante el ombudsman. Entre los invitados se divisaron también autoridades de distintas universidades de Tucumán.
Máximos responsables
Lejos de dejar afuera de la sede de la Defensoría las internas partidarias, Amado se refirió al conflicto que se desató -y va en escalada- entre Jaldo y el gobernador Juan Manzur a causa de la elección del ombudsman. “Pelea hay cuando son dos los que pelean, no cuando hay uno”, dijo el presidente subrogante de la Legislatura. A su vez, consideró normal que haya divisiones, pero remarcó que se arreglan o mejoran sólo cuando hay un encuentro entre las cabezas. “Nadie quería que pase esto. Quien les habla conversó con el gobernador y le dijo de la posibilidad de que esto ocurra; no nos escuchó la recomendación. Más allá de los nombres, vamos a seguir defendiendo un proyecto político partidario, señaló.
Al ser consultado sobre si vislumbra una tregua pronto, el monterizo dijo: “el acuerdo va a depender de Manzur y Jaldo. Son los máximo responsables de lo malo o lo bueno que pueda llegar a pasar después de esto”.
En LV12, en tanto, Gerónimo Vargas Aignasse, consideró que “se busca convertir a la Defensoría en un sicariato político” al servicio de la oposición.