Escritora, investigadora y docente universitaria. Enseñó literatura española y argentina en universidades de Tucumán, Córdoba y Venezuela. A principios del 2000, dirigió la importante casa editora de la UNT: “Ediciones del Rectorado”. De sus múltiples tareas decía: “todo eso configura una especie de sinfonía. El primer término es escribir. Si yo no fuera escritora no podría, tal vez, hacer todo lo otro (…) La base de todo es escribir. Yo escribiría lo mismo si no fuera docente, lo mismo si no fuera investigadora, pero no podría investigar ni enseñar si no fuera escritora”. Escribió relatos de ficción y ensayos. Fue colaboradora permanente del Suplemento Literario de LA GACETA, ganó el Premio La Nación con su “Leopoldo Lugones. Poesía y prosa”.
Contaba que una vez Ernesto Sábato la tentó para irse a Buenos Aires: “Cómo te vas a quedar en Tucumán, como una provinciana. La provincia no trasciende.”. A lo que contestó: “Es lo mismo que no vivir en París. Buenos Aires también puede quedar chico. En eso no hay que hacer concesiones, hay que quedarse donde uno está y luchar. Si se rompe la cabeza, mala suerte”. Murió el año pasado.