María Claudia Gagliardi atiende el teléfono y cuenta que está trabajando, pero no en sus artesanías en cuero y eco-cuero, sino en una panadería, en la que se desempeña desde hace unos días. Su única fuente laboral era la artesanía, pero la pandemia hizo tambalear su economía. Con el IFE y la ayuda de un hijo pudo mantenerse en pie y comprar materia prima, con la que todavía elabora productos de marroquinería.

“Como quien dice, el artesano siempre se inventa”, asegura para luego contar que con el aislamiento tuvo que empezar a hacer barbijos para tener una entrada de dinero. “Fue un año bastante difícil porque trabajamos únicamente con redes sociales. Fue complicado al comienzo, pero la gente se acostumbró al tema de las ventas en las redes y mejoró (el negocio) pero para fechas específicas, como el Día del Padre o de la Madre”, advierte. Mas allá de eso, considera que lo más positivo que ha dejado la pandemia es que la gente se animó más a comprar productos artesanales. “Se manejaba (antes) mucho el tema de lo industrial, ahora se está valorando más nuestro trabajo. Yo vendo industrial (porque tiene máquinas para ello) y a mano. La gente se vuelca más a lo artesanal, le gusta la innovación, lo nuevo”, ejemplifica.

Sólo miran

El regreso a la feria (en su caso, la del Parque Avellaneda) fue complicada. “La gente no se acercaba. Nuestros productos los tienen que tocar para ver la calidad y se hace difícil la venta”, resume. Narra que los interesados se acercan y miran, pero casi no compran. Además, no todos los artesanos pueden participar: “mayores de 60 o personas de riesgo no pueden”, alerta. De hecho, cuenta que algunas compañeras la pasaron muy mal económicamente durante el confinamiento y, aún hoy, por ser personas de edad avanzada, no pueden trabajar.

En caso de llegar la segunda ola y gracias a la primer cuarentena, ya sabe cómo hacer su trabajo en esta nueva realidad. “Si se cierra todo de nuevo tendremos que empezar como al principio, manejándonos online. Ya estamos más preparados, sabemos qué es lo que tenemos que hacer”, afirma.