Barrios de Pie realizó 120 ollas populares para denunciar políticas clientelares que afectan la alimentación de 4.200 niños y niñas de la provincia.
Ariel Argañaraz, coordinador provincial de Barrios de Pie expresó "En este difícil contexto socioeconómico que vivimos, Laura Alonso, funcionaria del Ministerio de Desarrollo Social, suspendió los refuerzos alimentarios destinados a alimentar a miles de niños en situación de pobreza. Paradójicamente, una funcionaria que dice defender los derechos de los que menos tienen suspendió hace 40 días la provisión de las meriendas fortificadas de la cual dependen 4.200 niños y niñas de la provincia que viven en condiciones de pobreza e indigencia"
Según Argañaraz lo que provocó esta suspensión fueron diferencias políticas. "Es inadmisible que por prácticas clientelares contra quienes no forman parte de su espacio político paguen los niños y niñas desprotegidas de la provincia. A pesar de haber hecho todas los trámites y presentadas todas las rendiciones de cuentas la insensibilidad de esta funcionaria está poniendo en peligro la salud nutricional de miles de niñas y niños tucumanos. Con el hambre de la gente no se juega", sentenció el dirigente social.
Finalmente dirigentes de Barrios de Pie remarcaron, además, el proceso de disminución del poder adquisitivo de los sectores trabajadores. "Incluso quienes tienen trabajo formal, perciben hoy un salario mínimo que no llega a cubrir la canasta básica alimentaria (CBA) con la cual se mide la indigencia. El gobierno tiene que terminar con este proceso de ajuste", indicaron.