Daniela Viaggiamari, más conocida como Dani “La Chepi”, tiene 41 años y desde hace cinco acumula más de 2,6 millones de seguidores en Instagram. Trabajó en teatros de todo el país y grabó su tema de difusión “Qué vas a hacer” que se puede escuchar a través de YouTube. Su popularidad se acrecentó semanas atrás cuando aceptó formar parte del reality con mayor rating de la TV argentina, MasterChef (lunes a jueves a las 22.30 y domingos a las 22 con la conducción de Santiago del Moro por Telefé)
“Me estaba por ir de vacaciones a Córdoba, yo no tengo idea de cocinar y no me imaginaba participando del programa. Me insistieron cuatro o cinco veces hasta que me dije: ¡es laburo!”, recuerda en diálogo con LA GACETA desde Buenos Aires. “Después lo pensé bien y yo estoy sin hacer teatro por la pandemia, no sé hasta cuándo porque decidí que cuando volvamos va a ser cuando estemos todos vacunados. Finalmente decidí sumarme a MasterChef luego de hablar con un psicólogo amigo mío que me dijo: ‘hacelo con miedo, pero hacelo’ ¡y acá estamos!”.
La Chepi es mamá de Isa, una pequeña que comenzó segundo grado, participa de muchos de sus posteos en Instagram y ganó un Martín Fierro Digital como “mejor labor infantil”: “pasamos encerradas las dos juntas toda la pandemia, imagínate”. Ahora la organización de la casa se vio conmocionada por las largas jornadas de grabación que demanda el programa hasta que la competencia finalice o La Chepi sea eliminada: “estoy disfrutándolo mucho ahora al programa, ¡no quiero que termine nunca!”, se sincera.
Con respecto a su relación con la cocina La Chepi se lo toma con humor: en un posteo antes de la competencia le pregunta a su mamá sobre su receta de ñoquis y la madre le contesta: “compras en el supermercado la mezcla que dice ‘para ñoquis’ y el tuco hecho en la fábrica de pastas y listo”, le responde su mamá. “En realidad soy popular por comer productos congelados y cuando no está mi hija, cenar un alfajor triple”, explica entre risas.
La competencia que se ve en televisión, genera cientos de comentarios en redes sociales y si bien La Chepi estaba acostumbrada a sus seguidores y a responder los comentarios, las primeras semanas del reality fueron duras: “Al principio me hizo muy mal leer que me ‘hacía’ la pobre o la de barrio. Yo soy así, no actúo nada de lo que se ve en TV ni siquiera cuando digo que me criaron a milanesas. Al principio me puso mal. Luego lo conversé con Santiago del Moro quien me dijo que solo debía tener en cuenta los comentarios de mi comunidad, la gente que me sigue y conoce desde hace tiempo y se alegra con mis logros y el camino recorrido. Lo mismo me dijo Sol Pérez, que un día me escuchó hablando sobre eso”, reflexiona.
La familia de Dani está dispersa: “hay uno en España, otro en Chile. A mi papá le dio un ACV y no puede hablar desde hace ocho años. Él es todo para mí. Me hizo muy mal un día que me largué a llorar -porque los olores de la cocina me llevaron a eso- eso y cuando me dijeron algo malo sobre eso me pareció muy irrespetuoso. Todavía no puedo creer que la gente agreda sin conocer al otro”.
“El día que hablé con Del Moro, no sabía si quería seguir porque no estaba acostumbrada a que hablen mal. Con mi novio ahora nos reímos de lo que dicen pero al principio fue difícil”, recordó la influencer y agregó: “Hay mucha envidia y el envidioso no quiere lo que vos tenés. En realidad no quiere que vos lo tengas”, concluye.
La historia con su novio, Javier Cardone, también fue motivo de titulares durante la pandemia cuando Chepi contó cómo se conocieron. El exfutbolista maneja un camión de residuos y durante el encierro Dani y su hija salían a aplaudirlo, le daban dibujos y caramelos. “El camionero nunca se bajaba, y un día se baja y cuando bajó... Un bebote, que no se lo puedo explicar”, relató días atrás en televisión. A partir de ahí, “chamuyo” mediante, comenzaron a salir.
Hoy los días de la actriz y cantante están realmente alborotados: “Me levanto temprano, me siento en el patio y mientras fumo un pucho y me tomo unos mates leo los mensajes de mi comunidad y trato de responderles a ellos. Me preparo para el programa, busco recetas en redes sociales, acompaño a mi hija a la escuela y luego me produzco para subir mis chivos e ir al programa”, cuenta.
“No sé qué pasará luego, pero me encantaría que la exposición que tengo me traiga cosas copadas como hacer un programa un humor al estilo de Juana y Sus Hermanas o poder organizar algunas actividades benéficas para los barrios carenciados”, cuenta y asegura: “lo que sí sé es que quiero seguir siendo feliz y viviendo de lo que me gusta hacer que esto”.
En Tucumán
La actriz y cantante llegó a Tucumán en 2019 y llenó el teatro Alberdi con su show “Ella”, en donde la acompañó el tucumano Federico Plaate en la dirección musical.
En el show realizaba un recorrido musical por diferentes estilos y canciones que habían marcado la vida de varias generaciones.
El show completo se puede disfrutar en el canal de YouTube de La Chepi que posee más de 76,200 suscriptores.