“Hisopado” fue tendencia ayer en la Legislatura. La confirmación de que el vicegobernador Osvaldo Jaldo dio positivo para covid-19 provocó preocupación e incertidumbre ya que son decenas las personas las que lo frecuentan a diario. Por eso, desde temprano, más de una veintena de empleados del entorno del presidente de la Cámara, su familia y una decena de legisladores concurrieron a laboratorios públicos y privados a testearse. Hasta anoche, todos los resultados fueron coincidentes: SARS-CoV-2 no detectable.
La novedad sanitaria, a su vez, puso en marcha una suerte de tregua mediática entre el jaldismo y el manzurismo luego de los sacudones políticos con quiebres, heridas, renuncias y el llamado de atención desde Buenos Aires. Sin embargo, se espera que el sismo oficialista comience a llegar a intendencias y concejos del interior.
Jaldo, de 62 años, transcurrió su segundo día de internación en el hospital Centro de Salud “con parámetros estables, con bajo rendimiento de oxígeno, compensado hemodinámicamente”, de acuerdo con el primer parte oficial. Fuentes cercanas a la segunda autoridad de Tucumán revelaron que ayer el tranqueño se encontraba de buen ánimo, más aliviado del dolor corporal que lo aquejaba y que estuvo dando directivas por teléfono. Agregaron que está internado en una sala especial, a pocos metros de los intendentes Roberto Moreno (Trancas) y Francisco Serra (Monteros), quienes también están cursando la covid-19.
Aliados y aislados
El terremoto político que provocó la elección de Eduardo Cobos como ombudsman tuvo como antesala varias reuniones con el vicegobernador en Presidencia de la Legislatura y un asado entre parlamentarios afines para consolidar estrategias y alianzas. Por este motivo, al menos una decena de legisladores del bloque Justicialista de Todos se sometieron a test rápidos (que dieron negativo) y aguardaban el resultado del PCR. Además, personal del Siprosa solicitó a los integrantes de la “mesa chica” jaldista aislarse preventivamente dos semanas por ser considerados contactos estrechos: Daniel Deiana, Javier Morof y Raúl Ferrazzano, entre otros. El flamante defensor del Pueblo corrió con la misma suerte.
El diagnóstico positivo también modificó el dinamismo de la Legislatura. Una veintena de empleados cercanos al vicegobernador tuvieron que hisoparse preventivamente, entre ellos custodios, choferes, mozos, secretarias y personal a cargo de la comunicación. Al mediodía se resolvió el cierre del palacio espejado de Muñecas 950 hasta el lunes para realizar intensas tareas de desinfección. Además, se resolvió restringir al máximo la actividad a partir de la próxima semana: se prohibirán los actos públicos y se limitará el número de personas en el edificio. Las fuentes consultadas indicaron que hay comisiones con reuniones programadas, por lo que se retomaría la actividad parlamentaria.
Dinámica a futuro
Antes del diagnóstico adverso, Jaldo había adelantado que la Cámara podría ir al recinto la semana entrante. Esa posibilidad quedaría supeditada a la evolución de la situación sanitaria de los parlamentarios. No obstante, fuentes legislativas coincidieron en que al menos la mitad de los legisladores ya cursó la enfermedad en 2020 y estimaron que sería difícil una reinfección.
Más allá de los temas que pudieran llegar a la mesa de Labor Parlamentaria para ser debatidos, no se descarta que se analicen modificaciones en la mesa de autoridades. Trascendió que dependerá de cómo se acomode la interna peronista. Actualmente Regino Amado (Justicialista de Todos) es el presidente subrogante (a cargo de la Cámara hasta que se recupere Jaldo); Gerónimo Vargas Aignasse (Lealtad Peronista), el vicepresidente primero; y Sandra Orquera (FR) la vicepresidenta segunda.
Lo que sí está claro que en la próxima sesión asumirá la persona que suceda a Cobos. Segundo en la lista de Movimiento de Integración Federal figura Enrique Raúl Aragón. La Junta Electoral Provincial notificó el martes que Aragón renunció a la banca. Quien sí la ocupará será Maia Martínez, ex comisionada rural de El Naranjo.
Otro enigma que comenzará a resolverse la semana entrante es saber qué ocurrirá con Juan Rojas y Paulo Ternavasio, quienes fueron expulsados de Fuerza Republicana por apoyar a Cobos. La posibilidad de formar unibloques era la que más fuerza tomaba hasta ayer. Sin embargo, quienes los contactaron aseguraron que aún no dialogaron porque estaban tratando de recuperarse de las embestidas en su contra.
A pesar de la pausa obligada, está claro que fuera de la Cámara la pelota seguirá rodando.