Con los adolescentes, los padres tienen que ser más estrictos, sostuvo el infectólogo Julio López Mañán. “Ellos están convencidos que nos les pasará nada y por eso no se cuidan ni se aíslan. Hoy son el grupo etario que más se expone”, resaltó.
Esta semana el retorno del secundario a las aulas también encendió la preocupación de los docentes por la transgresión de los adolescentes a las normas y protocolos de prevención de la covid-19. La famosa fiesta del Ultimo Primer Día (UPD) de los alumnos de sexto año, fue una de las tantas actividades que trajo aparejada la presencialidad. Sin embargo, para las autoridades sanitarias ya no es una novedad la concurrencia de los jóvenes a fiestas en época de pandemia. “Al grupo de menores de 20 años fue al que menos le impactó la pandemia y no presentó casos graves. Sabemos que las fiestas clandestinas siguen ocurriendo por lo que creemos que el hecho de que se encuentren para compartir en las escuelas con el distanciamiento y el protocolo dispuesto va a ser incluso más seguro y de menor riesgo’’, sostuvo Romina Cuezzo, médica de la Dirección de Epidemiología del Siprosa.
Las autoridades sanitarias piden que se sigan respetando las medidas bioseguridad y esperan más casos para las próximas semanas. En los primeros días de clases se debieron aislar 19 burbujas escolares por casos de covid-19. Casi todos los días hay alguna notificación por contagios. Ayer fue el turno de la escuela José María Torres, en La Cocha. Según informaron, la directora de la institución dio positivo. Quedaron aisladas también la vicedirectora y la secretaria, aunque no se cerró la escuela.