Mientras la modificación de Ganancias impulsada por Sergio Massa continúa cosechando avales políticos, algunos tributaristas ponen la lupa sobre la iniciativa porque el alcance de la medida dependerá de su reglamentación, en manos del Poder Ejecutivo Nacional o de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP).

¿Cuál será el impacto en Tucumán?, se les consultó a dos contadores especializados en Tributación. “El impacto en Tucumán será en primer lugar en la coparticipación, porque el Impuesto a las Ganancias es un impuesto coparticipable. De alguna forma el Gobierno nacional tendrá que compensar a las Provincias esa baja de recaudación y de coparticipación”, explicó Adriana Manfrini, contadora pública nacional. “En Tucumán una gran mayoría puede llegar a entrar en el beneficio porque aquí hay un gran número de empleados públicos. Sin embargo, será transitorio sobre todo para quienes están cerca del piso de $ 150.000. Sin ir más lejos, cuando se aprueben las paritarias en marzo, muchos van a pasar ese límite y no van a tener el beneficio. Entonces de esa gran masa que según el proyecto y los considerandos fundamentos de Massa va a ser alcanzada, finalmente va a quedar bastante limitada”, agregó. “El sistema tributario argentino se modifica con mucha frecuencia y dista mucho de ser armónico, respetando la igualdad, generalidad, proporcionalidad y capacidad contributiva, entre otros principios elementales. El proyecto de reducción presentado por Massa no resuelve estas situaciones”, explicó la contadora.

Uno de los puntos observados es la actualización anual de los montos y la exclusión de algunos trabajadores. “Los autónomos no están contemplados en la modificación. Sin embargo, la propuesta -en principio- es positiva. Todo lo que beneficia a los trabajadores es positivo porque les dará un margen para consumo, ahorro, inversión, pero al ser un proyecto mal gestado no va a tener el impacto positivo que podría. Los $ 150.000 de bruto del nuevo piso se van a actualizar no por la inflación, sino por el índice promedio de las remuneraciones, que siempre va por detrás de la inflación”, finalizó.

Antecedentes

Para Octavio Concilio, contador tributarista, la clave para entender la futura modificación tiene su referencia en una medida similar dictada en 2013, durante la presidencia de Cristina Fernández. “Para entender esta medida hay que remontarse a 2013, cuando sacaron el decreto 12/42 donde se establecía que dejaban de pagar ganancias los que cobraban por menos de $ 15.000. Lo que cobraran por más de $ 15.000 seguían más o menos con la estructura en la que estaban hasta esa fecha. Acá puede pasar lo mismo. Dejarían de pagar ganancias los que cobran menos de $ 150.000, no se sabe aún si es bruto o neto, se entiende que será bruto. Será menor la incidencia porque la gente por ahí mira lo que cobra de bolsillo y no lo que cobra de bruto. El problema es qué pasa con el que cobra $ 150.001, o para ser más extremista, con quien cobra un centavo más del potencial nuevo piso. ¿No está incluido en el proyecto de ley, lo deberá reglamentar AFIP o el Ejecutivo?”, planteó el experto.

“Tenemos la experiencia de ese decreto que dejó un congelamiento por dos años: había gente que en ese momento fue alcanzada por el beneficio y luego tuvo un incremento para cobrar $ 35.000 y no pagaba ganancias porque estaba congelado a la fecha aunque luego tuvo incrementos salariales, y otros ganaban lo mismo y pagaban una fortuna de ganancias. Podría repetirse ahora, dependiendo de la reglamentación”, continuó Concilio. “Con esta modificación, las dudas pasarán por si tiene vigencia a partir del mes que viene cuando es un impuesto anual, no se aclara a qué fecha hay que considerar los $ 150.000, si hay que esperar todo el 2021, si se congela desde enero. Si yo cobro $ 150.001 y el mes que viene cobro $ 130.000 porque he cobrado unas horas extras o he ganado excepcionalmente más, ¿quedo dentro del impuesto o fuera? Hay que ver la reglamentación si esto sale, cuando se contemplen todas estas situaciones y sabremos cuántos beneficiarios habrá”, completó.

Tres claves de ganancias

1- El oficialismo busca aliviar el bolsillo de la clase media. La iniciativa busca que los trabajadores en relación de dependencia que ganen menos de $ 150.000 brutos dejen de pagar el tributo.

2- La propuesta de Massa busca eximir además a jubilados y pensionados que cobren hasta ocho haberes mínimos, monto que actualmente ronda los $ 152.000. Si se convierte en ley, aliviará a 1,2 millón de trabajadores.

3- Actualmente unos 2,3 millones de trabajadores, jubilados y pensionados pagan Ganancias. El mínimo no imponible para este año para un trabajador soltero sin hijos a cargo es de $ 74.812.