Si es moda, o parte de una nueva realidad, no importa. Lo importante es que en el pádel y el crossfit funcional, entre muchas otras actividades, se encuentran caras nuevas todos los días. Pero estas personas ¿son nuevas en el mundo de la gimnasia o son personas que no soportaban el sedentarismo debido a que estaban acostumbrados a una vida de deportistas? “Hay de las dos cosas. Por un lado, la gente que se volcaba a la natación, el fútbol o el rugby que, por ejemplo, debido a la cuarentena o por algún contacto estrecho, no quería salir. Así, necesitaba hacer algo y decidió optar por esto. También están quienes nunca han hecho algo por el estilo, querían empezar algo nuevo y se adaptan de a poco”, comentó Fernando Cruz en base a los nuevos ingresantes que ve en Hellbox, lugar donde trabaja.

Por el lado del mundo del pádel, fue más común la aparición de personas que rara vez hicieron esfuerzo corporal y decidieron aprovechar la oportunidad para cambiar sus hábitos. “Pude notar ambos tipos, pero vi más personas que nunca antes habían practicado deportes o hacía mucho que no lo hacían y decidieron comenzar con el pádel por cuestiones de salud”, describe Nicolás Malek la situación con la que aparecen nuevos alumnos o integrantes en el club.

Pero esto no es una ciencia exacta. Lucas Gómez no vio el mismo fenómeno de los dos anteriores ejemplos en el gimnasio donde trabaja. “No noté un aumento de gente, pero sí un aumento en la cantidad de consultas. Consultaron más para empezar en el gimnasio, pero no todos llegaron a concretar la idea. Cambió su manera de pensar, pero no su accionar”, explicó el profesor de educación física sobre los diversos llamados y mensajes que recibía a diario en su Instagram de trabajo (@palestrafit_blg), pero que no llevaron a ningún lado.