El vuelo que el Airbus 330-200 de Aerolíneas Argentinas emprenderá en la noche del jueves hacia Moscú, al igual que el realizado en diciembre, constituye el tramo más largo que haya realizado la compañía, sin escalas, en toda su historia.
Según explicó el titular de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), Pablo Biró, las 16 horas de ida y las casi 18 que les demandó el regreso, representaron el tramo más largo que hayan volado “en la historia de la empresa”.
Biró explicó que ese primer vuelo hacia y desde Moscú para traer al país las vacuna, que se inició el 22 de diciembre último y culminó el 24- "ha sido el mayor tramo sin escalas que hizo Aerolíneas Argentinas en su historia”.
Hasta ese momento, los vuelos de mayor duración habían sido los de 14 horas directos a Sydney o también de poco menos de 14 horas a Roma, 13 horas a Auckland, Nueva Zelanda o 13 horas a Madrid, precisó.
El vuelo a Moscú insume 16 horas de ida y casi 18 de vuelta, debido a los vientos y la rotación de la tierra, una travesía que nunca habían realizado los pilotos de Aerolíneas.
De acuerdo al plan de vuelo, la aeronave despegará el jueves a las 21 desde el aeropuerto Internacional de Ezeiza, poniendo rumbo hacia Uruguay, sobrevolará luego Brasil hasta la altura de la ciudad de Recife y desde allí iniciará el cruce del Océano Atlántico para ingresar al continente europeo por España, sobrevolar Francia, Suiza, Alemania, República Checa, Polonia y Bielorrusia, y finalmente entrar en el espacio aéreo ruso hasta su aterrizaje en el Aeropuerto Internacional Sheremétievo tras 16 horas de vuelo, poco antes de las 19 (hora local).
El tiempo de carga en Moscú, partiendo de la base de la experiencia anterior, no debería demandar más de cinco horas por lo que la aeronave argentina estaría despegando desde la capital rusa, tras completar la recepción de las vacunas y cumplir con los trámites aduaneros, alrededor de la medianoche.
Sputnik V: el Gobierno ratifica su estrategia de completar el esquema de vacunación con las dos dosisEl regreso varía un poco respecto al viaje de ida, ya que la aeronave sobrevuela Europa un poco más al norte, atravesando, luego de dejar el espacio aéreo ruso, Bielorrusia, Lituania, Polonia, Alemania, Francia, el norte de España y Portugal, iniciando allí el cruce del Océano Atlántico, para ingresar al continente americano a la altura de Fortaleza (Brasil), luego sobrevolar Uruguay hasta cruzar el Río de la Plata y aterrizar, después de 18 horas, en Ezeiza el sábado antes del mediodía.
En total son 40 horas, entre ida, carga y vuelta, en las que la tripulación prácticamente no va a poder descender del avión y para todo el tramo la comida se lleva desde Buenos Aires.
La carga de la vacuna Sputnik V, un total de 8 toneladas, viajará en la bodega del Airbus, embalada en contenedores denominados “Thermobox”, fabricados por la empresa DHL y que mantienen la refrigeración durante el tiempo suficiente para completar el vuelo sin escalas entre Moscú y Buenos Aires, así como también en la descarga y primera etapa de distribución. (Télam)