Marley y Lizy Tagliani no pasaron desapercibidos en la recorrida que hicieron por la provincia, para realizar una emisión especial del programa “Por el mundo”.
LA GACETA siguió de cerca los pasos de ambos por Tucumán y el domingo, al fin, se pudo conocer el programa, que fue festejado por el sector turístico local. “Desde el Ente celebramos la realización de estas acciones promocionales que nos permiten mostrar nuestra propuesta y llegar con ella a un gran público local y nacional, más en un año tan difícil para la industria. Buscamos que la gente piense en Tucumán y nos elija como próximo destino turístico”, expresó la vicepresidenta del Ente Autárquico Tucumán Turismo (EATT), Elena Colombres Garmendia.
Tucumán llegó al mapamundi de Marley y Lizy TaglianiLa experiencia tucumana
En la pantalla de Telefé su pude ver que a la estadía de Marley y Lizy no le faltaron los vinos de altura, la foto en la Casa Histórica vestidos de época y el famoso sándwich de milanesa tucumano.
En la primera jornada, recorrieron la oferta de nuestro Valle Calchaquí, donde degustaron nuestros vinos de altura y conocieron la producción vitivinícola en Colalao del Valle. Continuaron por la emblemática Ruta 40 hacia el próximo destino: la iCiudad Sagrada de Quilmes. Antes de iniciar la visita al sitio arqueológico, Marley y Lizy fueron recibidos por la comunidad originaria y participaron del ritual de ofrenda a la Pachamama, además de ser agasajados con unas coplas.
En el camino a Tafí del Valle, el equipo de “Por el mundo” hizo una parada en el Infiernillo para conocer el famoso Cardón El Abuelo, un ejemplar de más de 400 años que sorprende a los turistas en el marco de un majestuoso paisaje a 2.500 metros de altura. Ya instalados en la villa veraniega, vivieron una estadía típica rural en una estancia colonial de más de 200 años de historia.
Para su segunda jornada y con un sol a pleno, Marley y Lizy llegaron hasta las Yungas tucumanas para visitar El Cadillal, donde navegaron por el dique y se animaron a hacer rápel por primera vez en sus vidas.
Después de la intensidad, llegó la calma. Por la tarde, ya en la ciudad capital, vieron el musical del Bicentenario “Tina, el rumor de una Nación” y visitaron la Casa Histórica de la Independencia, donde se vistieron de época para encarnar a los protagonistas del Congreso de 1816.
Como broche de oro de un viaje a pura adrenalina y emoción, el equipo se dio el gusto de probar el famoso sándwich de milanesa en un local céntrico y de preparar sus propias empanadas tucumanas con la ayuda de la Campeona Nacional de Famaillá, Cristina Rojas.