MOSCÚ.- Las autoridades de la capital de Rusia aplican desde ayer la vacuna contra el coronavirus Sputnik V, con la que ese país busca ganar la carrera mundial y ser el primero en inmunizar a su población. Según publicó el diario español El País, la campaña de vacunación comenzó por los personales sanitario, de enseñanza y de entidades sociales, que están considerados dentro de los grupos de alto riesgo. Las inyecciones serán gratuitas y voluntarias.

A partir de mañana, según las órdenes del presidente, Vladímir Putin, el operativo se expandirá hacia el resto de las regiones rusas y otros grupos de población (aunque esto ocurrirá poco a poco debido a las limitaciones de producción). En Rusia, el cuarto país del mundo con mayor número de contagios confirmados (2,4 millones), el virus se ha propagado a un ritmo récord durante la segunda ola de infecciones.

Dudas y presiones

Moscú, donde viven 13 millones de personas, es la ciudad más golpeada por la covid-19. Ayer sumó 7.993 nuevos casos y casi un centenar de fallecidos, según los datos oficiales, que suelen no contabilizar a quienes tienen patologías previas.

En este contexto, decenas de personas del sector sanitario y de la enseñanza recibieron mensajes de organismos oficiales con las instrucciones de vacunación. Algunas también fueron animadas por sus centros de trabajo a ponerse la vacuna. En un instituto de Moscú, la dirección también recomendó encarecidamente a sus empleados que se vacunen, según mensajes de WhatsApp mencionados por El País. Ese centro informó también de que pondrá en marcha un punto de vacunación en el propio instituto.

Sin embargo, la vacuna, que según sus fabricantes tiene 92 % de efectividad (conforme a datos preliminares), genera algunas dudas en la población porque aún no concluyeron los ensayos. Empleados del sector público, por ejemplo, le comentaron a la agencia de noticias Reuters que han recibido presiones para ponérsela.

Los requisitos son estar entre los considerados grupos de riesgo, tener entre 18 y 60 años, no padecer enfermedades crónicas, no haber tenido alguna enfermedad respiratoria en las semanas anteriores y no haber recibido ninguna otra vacuna en los últimos 12 días. El fármaco está contraindicado para embarazadas y lactantes.

Presupuesto especial

Serguéi Sobyanin, intendente de Moscú y uno de los hombres más cercanos a Putin, aseguró que durante las primeras horas se anotaron más de 5.000 personas para recibir la inyección. Su equipo afirma que destinará U$S 130 millones de su presupuesto a la campaña de vacunación.

Como Pfizer y BioNtech, el Instituto Gamaleya de Moscú, desarrollador de la Sputnik V, todavía no publicó datos sobre su vacuna, que sin embargo fue la primera en recibir aprobación estatal en el mundo. La Administración de Putin tiene esperanzas de que el fármaco sirva para atajar la pandemia y devuelva a Rusia a la vanguardia científica, lugar que supo ocupar en la época soviética.