El concejal José Luis Coronel tiene una voz áspera que es fácil de escuchar. Se jacta de dos cosas: de haber empezado su carrera en el sistema de Salud limpiando baños hasta que llegó a ser jefe del Departamento de Operativos Móviles que está ubicado en Italia y Alberti, en la puerta de ingreso del barrio Juan XXIII (“La Bombilla”). La otra: haberle servido el desayuno y los cafés al gobernador Juan Manzur, de lunes a sábado, durante ocho meses, cuando era presidente del Siprosa. “Él es mi único conductor”, señaló el hombre que también es parte de ATSA.

- ¿Por qué dice que esta denuncia es una causa política?

- Debe ser que a alguien no le gusta el trabajo social que vengo haciendo desde hace años. Actualmente cuento con 11 merenderos y nueve comedores que son de barrios vulnerables y que no están dentro de las cuatro avenidas. Yo trabajo en las orillas.

- ¿Cómo es su relación con el legislador Reneé Ramírez?

- Estamos charlando de cuestiones laborales, hablamos dos veces. Hubo un desencuentro y no se puede estar peleado todo el tiempo y estar recibiendo y tirando palos. Quedamos en juntarnos para hablar sobre el proyecto político.

- ¿Cuál fue el motivo de la ruptura?

- Hubo una serie de desacuerdo el día de las elecciones. Afirmaba que había una cortada de votos, él la negó. Hubo una serie de discusiones que generó una ruptura que lleva más de un año. Políticamente quedé solo, con el gobernador como único conductor.

- ¿Por qué cree que lo señalan desde la Legislatura?

- Creo que tiene que ver con un intercambio de opiniones que se generaron porque algunos legisladores salieron a cuestionar el trabajo del COE. Eran malas opiniones, porque estoy en la salud hace 30 años y las conozco a todas. Entonces, la respuesta de un legislador fue que se tendría que investigar al Concejo Deliberante porque había ediles que estaban relacionados con la droga y que tenían problemas con la droga.

- ¿Qué opinión le merecen esos dichos?

- Como lo dije públicamente, si este legislador tenía los resultados de algunas investigaciones, debería denunciar y, si contaba con algunas pruebas, debería presentarlas en la Justicia. Y si no lo hacía, era cómplice.

- Una cosa es una discusión política y otra, una acusación de narcotráfico…

- El solo hecho de haber generado el rumor de que yo tenía incidencia en el nombramiento de este chico al que le encontraron 120 kilos de marihuana forma parte de la mala intencionalidad, la mala política. Cómo me gustaría que estas cosas se resuelvan cara a cara, sentado en una mesa. Estas cosas golpean, especialmente a la familia, pero no me quiebro, por las más de 1.200 personas que asisto. Dios me juzgará.


Viejos socios políticos

El legislador Reneé Ramírez prefirió mantenerse en silencio

Pese a los insistentes pedido realizados por LA GACETA y por la producción de “Panorama Tucumano”, el legislador Reneé Ramírez, el encargado de prensa de ATSA y la abogada del gremio no respondieron ninguno de los pedidos para que el parlamentario diera a conocer su versión sobre la causa vinculada al tráfico de drogas. Tampoco sobre su relación con el concejal José Luis Coronel. Ambos fueron socios políticos en el gremio de los trabajadores de la sanidad y encabezaron la lista para ocupar un cargo en la Legislatura y en el Concejo Deliberante por el Frente Solidario Laborista Solidario.