Se abre Facebook en la pestaña para comprar o vender servicios y ahí está: decenas de usuarios que se ofrecen para conseguir turnos para casi cualquier trámite. Bancos, Anses, oficina de Tránsito de cada municipio, obras sociales. Y también en cada grupo de consultas multitudinario de Tucumán. Por un valor que ronda entre los $ 200 y los $ 800, dependiendo del trámite. Por la pandemia la atención al público sólo se realiza por turnos. Como no todos tienen la misma posibilidad de acceder a un dispositivo digital, hay quienes ofrecen ese servicio. En algunos casos, como ocurre en Anses, la tarea termina en un nuevo “cuento del tío”.
Enrique Salvatierra, titular de la Unidad de Atención Integral (UDAI) Tucumán de Anses, explicó que en muchos casos se genera un perjuicio al beneficiario. “Los turnos son gratis pero si una persona no puede solicitarlo porque no tiene los medios o quiere ahorrarse la tarea, no podemos más que decirle que todo el trámite es gratis”, planteó Salvatierra. Y agregó: “El trastorno que tenemos es la persona que llega con un turno pero no es para lo que necesita hacer. Supongamos que una persona necesite un turno para iniciar el trámite para la jubilación, pero quién le ha solicitado el turno sabe que se asignan menos turnos para eso, entonces le consigue uno para completar la libreta de la Asignación Universal por Hijo, y le imprime la hoja pero le cambia el texto donde dice qué turno es. Ahí se estafa a la persona y nos causa problemas porque el software asigna una cierta cantidad de turnos por día y para cada trámite. Si una persona sacó equivocadamente un turno para fondo desempleo cuando quería tramitar la jubilación, el sistema se bloquea para evitar irregularidades y el trabajador no puede realizar lo que necesita ese beneficiario. Ahora hay un 20% del plantel trabajando presencialmente, por lo que hay menos turnos para trámites presenciales. Esta persona se presenta en la UDAI con todos los papeles y no puede hacer el trámite, tiene que volver a su casa, enojada y con razón reclama que sí tiene un turno. El que vendió el turno se lava las manos, ya lo vendió. Esta semana nos pasó varias veces, no fueron errores por un dedo mal puesto”.
“No lo veo como mafias, pero sí son personas que se aprovechan en algunas ocasiones de la gente, los que sacan cualquier turno y después perjudican al beneficiario. Son personas inescrupulosas que saben esto. Lamentablemente se nota el impacto que tiene la brecha digital en la población”, agregó Salvatierra. Destacó que la única forma para combatir esto es la atención virtual, donde no se requiere turno. La persona ingresa al sistema en la página de Anses y hace el trámite directamente con los empleados que trabajan desde casa y se responden consultas por redes sociales.