Si de sufrimiento argentino se trata, también asoma lo que le pasó ayer a José María López (foto). Había liderado durante buena parte las “24 horas de Le Mans”. Pero esos imprevistos que siempre aparecen en el medio, aparecieron nuevamente y “Pechito”, que tenía todo para festejar a lo grande, debió conformarse con subirse al podio. Fue 3° tras partir con un Toyota TS050 Hybrid desde la “pole” y liderar la primera mitad de la prueba.
Diego Schwartzman: primero hay que saber sufrirPese a la correcta performance del cordobés, el equipo que “Pechito” integra junto con el británico Mike Conway y el japonés Kamui Kobayashi no pudo llevarse el triunfo debido a una falla técnica cuando faltaban 11 horas y 48 minutos para el final de la prueba en el autódromo de La Sarthe.
La mala fortuna apareció en escena para la escudería Toyota Gazoo Racing en el momento en el que el auto número 7 era comandado por Kobayashi. Un problema en el turbocompresor, obligó al piloto a ingresar a boxes y esa asistencia, que duró 29 minutos, lo hizo perder tres posiciones. Así, del primero retrocedió al cuarto lugar. “Pechito” retomó el control tras esa parada y logró recuperar una posición, pero no pudo evitar que la victoria se la lleve el otro coche de su escudería, piloteado por el francés Sebastien Buemi, el japonés Kazuki Nakajima y el neozelandés Brendon Hartley.
Nada es sencillo en la carrera de “Pechito”. Eso volvió a quedar demostrado ayer. De todos modos, lo bueno para él es estar y seguir intentándolo.