El secretario judicial que labró las actas que presentó el juez Enrique Pedicone en su denuncia contra el vocal de la Corte Daniel Leiva aseguró en una presentación ante la Justicia que fue obligado por el ex camarista a redactar el escrito y afirmó que nunca escuchó los audios a los que se refiere el documento que firmó, porque en realidad Pedicone le dictó los textos.

Pedicone sostiene que el miembro del superior tribunal incurrió en los presuntos delitos de tráfico de influencias, coacción y violación de los deberes de funcionario público, cuando le pidió en la mañana del 28 de julio de 2020 que “maneje la intensidad” de la causa contra el legislador Ricardo Bussi, por supuesto abuso sexual y corrupción, en la medida en que el opositor fuera más o menos funcional al oficialismo. 

Ese día, a las 10, se celebró una audiencia pública por ese caso. Según Pedicone, él grabó a Leiva cuando le formulaba estos planteos e hizo que el actuario Fernando Valladares diera fe del contenido de esos audios.

“El 28 de julio de 2020, siendo las 8.30 aproximadamente, Su Señoría Enrique Pedicone me indicó que proceda a confeccionar acta, orden a la cual accedí por dar cumplimiento al superior. El momento de la confección del acta fue previo a iniciar audiencia programada, ante lo cual su pedido fue realizado de forma intempestiva y con celeridad”, sostiene Valladares en el presentación formalizada durante la tarde del viernes, minutos antes de las 20, según pudo confirmar LA GACETA.

“Su Señoría verbalizó el contenido del acta de un audio, del cual yo desconocía su contenido y procedencia, y no pudiendo constatar la veracidad de sus dichos, ni pudiendo identificar ni dar fe de quien provenían, sólo me limité a escribir lo que Su Señoría me dictaba. La confección del acta fue de forma manuscrita a pedido de Su Señoría. Accedí a su pedido por el temor reverencial de su persona y cargo”, sostuvo el secretario de la Sala I de la Cámara Conclusional.

Consultado por este diario, el juez Pedicone ratificó la validez de las actas labradas y fechadas hace más de un mes. Puntualizó que esos documentos son “hechos jurídicos”, cuya validez se encuentra más allá de las opiniones personales. "Yo ratifico lo que denuncié. Sabía que podía ocurrir esto con Valladares y, por eso, tomé mis precauciones", agregó el juez.