Aunque el calendario diga lo contrario, lo lapachos ya nos dicen “a los gritos” que en Tucumán la primavera se está instalando. A los empujones, la pobre, porque, con este extremadamente seco invierno que hemos vivido (los expertos no recuerdan uno tan terrible desde 2009), lograr imponer el verde a la pobre le va a costar trabajo. Pero podemos darle la bienvenida y ayudarla a transformar nuestros jardines y nuestros balcones.

Para empezar, ya mismo urge el riego (podés dejar de leer, poner la manguera y volver); principalmente, de la plantas que ya están esbozando pimpollos y regalando las primeras flores. Pero también para recuperar el césped, tan amarillo y ralo, que ha quedado. “Conviene regar de noche -destaca el ingeniero José Isa- porque así se evita la evaporación del suelo y el evaoptranspiración de las plantas, y la tierra permanece húmeda más tiempo.”

Limpieza

Mientras manguera y regador hacen lo suyo, podremos encarar la eliminación de “malas hierbas”, y en esto es clave un dato: deben salir de raíz; si no, inmediatamente las tendrás allí de nuevo.

Cuidado: no es que sean malas en sí mismas. De hecho, se cuentan entre ellas los tréboles y los dientes de león, por ejemplo, que pueden tener usos beneficiosos. Lo que sucede es que en el jardín y las macetas compiten por el agua y los nutrientes, y en las superficies de césped, además, interrumpen la carpeta verde y a veces, hasta se imponen sobre ella.

Para eliminarlas lo ideal es que la tierra esté húmeda; el trabajo puede hacerse a mano, y con ayuda de azadas o palitas; pero para superficies más grandes también existen herbicidas naturales (ver “Herbicidas...”).

COLOR Y ALEGRÍA. Una vez que tengas la tierra renovada y con los nutrientes recuperados, los plantines te permitirán un cambio de look jardinero instantáneo.

En las plantas hay que eliminar ramas y hojas secas. Para poda más profunda, en la algunos casos llegamos tarde (por eso de llevarle el apunte al calendario). “Pero no en todos: las plantas que florecen después de la primavera, como el jazmín del país, por ejemplo, se pueden podar ahora. Y hay otras que, aunque lo ideal habría sido hacerlo más temprano, como los rosales, sí o sí deben ser podadas”, destaca Isa.

La poda

“Y también necesitan poda las que no tienen flores, pero deben recuperar su forma -agrega Ilda Cazajus, socia fundadora del Garden Tucumán- Si las plantas no se podan, brotan desde los tallos viejos y muchas veces al año siguiente están todas desgarbadas”.

Una vez que el panorama quedó limpio, el siguiente paso es también muy importante: recuperar lo profundo del terreno. Abonar el suelo con sustrato de calidad es vital para que las plantas que ya existían y las que tengas nuevas crezcan fuertes y vigorosas. Si estuviste preparando compost durante el invierno, es buen momento de aprovecharlo.

“El frío y la sequía han apelmazado el suelo -destaca Cazajus-, así que hay removerlo para oxigenarlo y nutrir (una de las opciones es agregar mantillo a la tierra); y para que el agua del riego penetre más profundamente”.

“En el caso de las macetas -señala Isa-, si el sustrato tiene más de un año hay que cambiarlo o enriquecerlo con un fertilizante granulado completo. Hay de varias marcas, lo que importa es que esté equilibrado”. Y si vas a cambiar la tierra y la planta ha crecido mucho, quizás no sea mala idea aprovechar y regalarle maceta nueva.

Actrices principales

Pero si hay protagonistas requeridas en esta temporada, esas son las flores. “Con la tierra ya preparada para recibirlos, gracias a los plantines de estación en un ratito podemos tener un jardín florido”, dice Cazajus y enumera: marimonias, anémonas, pensamientos, petunias, conejitos, clavelinas... “Soportan bien el sol y seguirán dando flores hasta enero”, agrega.

“Y para semisombra (o balcones que miren al sur), las alegrías del hogar, las prímulas...”, informa Isa.

Pero también requieren dedicación las plantas grandes que nos regalan flores todos los años y están “explotando” en este momento, como las azaleas, el jazmín chino, las camelias... y hasta los naranjos, para disfrutar los azahares ahora y las naranjas, el año que viene.

“La floración es una etapa muy exigente para las plantas; necesitan mucho riego y alimento. Un modo natural de ayudarlas en este momento de su ciclo es un ‘té’ de cascaras de banana, que les aporta mucho potasio”, informa Isa.

“Ya pronto se sumarán las clivias, que necesitan estar un poco protegidas del sol, y los agapantos, que, en cambio lo toleran bien. Pero ambos necesitan mucha luz. Y aunque la floración es breve, es muy hermosa, y durante el invierno nos regalan un verde perenne”, resalta Cazajus.

Algunas, como las azaleas, necesitan tener tierra ácida, así que es buen momento para agregar pinocha o (especialmente en macetas, por la escala) las hojitas del té de tu merienda.

Herbicidas naturales

Sal: se puede usarla directamente o mezclada con 2 tazas de agua. Pero nunca echar sobre las plantas que se quiere preservar, porque se secarán.

Vinagre (de cualquier tipo): mezclar 1,5 litro con una cucharada de jabón líquido y otra de jugo de limón; pulverizar las hierbas que se quiera quitar.

Bicarbonato: es “preventivo”; espolvorearlo para impedir que crezcan malas hierbas (puede servir en las tazas de los árboles).

- $ 30-90: en ese rango se mueve el precio de los plantines, según el tamaño.