La Organización Mundial de la Salud (OMS) afirmó que más de la mitad de las instalaciones sanitarias de la capital de Líbano, Beirut, no están operativas a causa de los daños sufridos por las explosiones registradas la semana pasada en el puerto de la ciudad.

El director de operaciones de emergencia del organismo, Richard Brennan, dijo que, al menos, tres grandes hospitales en Beirut quedaron fuera de servicio y que otros tres están operando muy por debajo de su capacidad normal. Además, gran parte de las instalaciones que están operativas tienen “niveles más bajos de funcionalidad” que los previos a las explosiones del 4 de agosto, que dejaron más de 200 muertos y 7.000 heridos. (Europa Press)