El papa Francisco pidió hoy que la comunidad internacional ayude a Líbano a "superar la grave crisis que está atravesando", profundizada por las explosiones que ayer provocaron decenas de muertos y miles de heridos en la zona portuaria de la capital Beirut.
"Ayer, en Beirut, en la zona del puerto, fortísimas explosiones causaron decenas de muertos y miles de heridos y destrucciones muy graves. Rezamos por las víctimas y sus familiares", sostuvo el pontífice durante la audiencia general en el Palacio Apostólico del Vaticano.
Líbano sufrió ayer otro golpe contundente a su ya deteriorada situación socioeconómica con dos explosiones en la zona portuaria de Beirut, que dejaron decenas de muertos y miles de heridos, hospitales destruidos o desbordados e impactantes imágenes que dieron la vuelta al mundo.
"Rezamos por el Líbano, para que con el esfuerzo de todos sus componentes políticos, sociales y religiosos pueda afrontar este momento tan trágico y doloroso", agregó Jorge Bergoglio.
En ese marco, el Papa deseó que el país asiático pueda, "con la ayuda de la comunidad internacional, superar la grave crisis que está atravesando".
Durante su catequesis de hoy, el Papa se refirió también a la pandemia de coronavirus que "sigue causando dolor y sufrimiento en toda la humanidad, sembrando muerte y un sinnúmero de enfermos".
"Además, muchas personas y familias viven un tiempo de incertidumbre por los problemas socioeconómicos que ha producido, y que golpean sobre todo a los más pobres", lamentó el Papa.
Francisco retomó hoy las audiencias generales de los días miércoles tras la pausa estival de julio, aunque las celebraciones continúan realizándose, como desde el inicio de la pandemia, en la biblioteca privada del Papa, sin público, y no en la Plaza San Pedro como era costumbre hasta la difusión del coronavirus.