El gol es la máxima expresión del fútbol. Quizás es por eso que, para quien se encarga de hacerlos, resulta mucho más fácil ganarse un lugar en la memoria que para quien se gana la vida tratando de evitarlos. Sin embargo, entre los que se calzan los guantes también hay estrellas, y una de ellas es, sin dudas, Iker Casillas. El español, que ya había sido canonizado en vida en su patria desde la final del Mundial 2010, anunció su retiro del fútbol profesional con un extenso comunicado que difundió por sus redes sociales.

“Es uno de los días más importantes, y a la vez difíciles, de mi carrera deportiva: ha llegado el momento de decir adiós. Y como todo camino, ha tenido momentos buenos y menos buenos, alegrías, pero también tristezas. En este momento de mi vida, y con perspectiva, puedo decir sin lugar a dudas que valió la pena”, sostuvo el arquero, históricamente identificado con Real Madrid pese a que los últimos años de su carrera los desplegó en Porto, el único otro club en el que atajó.

“Es un día difícil, pero no triste. Me considero un afortunado por llegar hasta aquí, por cómo he llegado, por haber conseguido todo lo que he conseguido, por todo ello... estoy feliz”, destacó el oriundo de Móstoles, una comuna de Madrid.

“San Iker” llevaba más de un año sin jugar profesionalmente desde que en mayo del año pasado sufrió un infarto mientras se entrenaba con el plantel de Porto, club al que llegó en 2015 tras 16 temporadas en Real Madrid. Finalmente, a los 39 años, y sin poder despedirse en la cancha a causa de la pandemia, Iker cerró una impresionante foja de 1.039 partidos. Entre ellos, uno de los más importantes fue la final del Mundial de Sudáfrica, donde le ganó un mano a mano al holandés Arjen Robben que le permitió a España coronarse por primera vez.

Sobre el Madrid, club en el que debutó en 1999 y con el que ganó tres Champions, dos Intercontinentales y un Mundial de Clubes, señaló en el agradecimiento: “pasé toda una vida, me educaron, me vieron e hicieron crecer, por inculcarme sus valores, y, en definitiva, por ser lo que soy”.

“Al Porto, por acogerme como lo hizo, por enseñarme a ver las cosas desde otro ángulo, a darme la oportunidad de conocer bien un club y una ciudad de la que me he enamorado y que siempre llevaré ene el corazón. Siempre formaréis parte de mí”, agregó sobre el club portugués, con el que ganó dos títulos de liga, uno de copa y una Supercopa. (Télam-Especial)