Mientras el presidente del interbloque de diputados de Juntos por el Cambio, Mario Negri, tomó distancia del comunicado emitido el sábado por ese espacio político en relación al asesinato de Fabián Gutiérrez, y, tras señalar que no participó de su redacción, dijo que él hubiera “esperado un par de horas” y consideró que la causa no tiene elementos para pasar a la órbita federal, como había reclamado la coalición. En tanto, el ex ministro del Interior de la gestión de Cambiemos, Rogelio Frigerio, representante del ala más moderada del PRO, y asociado a la pata peronista que dirige el ex titular de la Cámara baja Emilio Monzó, planteó que “hay que salir de las grietas” y “tener un comportamiento responsable y moderado”.
Por su lado, el diputado por Tucumán, José Cano, aseguró que el documento que suscribió Juntos por el Cambio “planteaba que la Justicia actúe con transparencia” y dijo que ese texto “no hacía imputaciones al Presidente, a la vicepresidenta o que algún funcionario tenga que ver con el homicidio”. No obstante, apuntó que “la muerte de Gutiérrez no es de una persona común” sino que “tiene connotaciones que tiene que ver con algunas de las hipótesis que maneja el juez y que la Justicia tiene que investigar”.
Por su lado, el Jefe de Gabinete del Ministerio de Relaciones Exteriores, Guillermo Chaves, expresó su preocupación por el “grado de odio e irresponsabilidad con el que actúa parte de la dirigencia de Juntos por el Cambio”, ante el intento de vincular a la política con el asesinato de Gutiérrez. Y los instó a “tomar conciencia y recapacitar”, porque lo “que está en juego es la República Argentina”. (Télam)