Hay movimiento en el ambiente del voley pensando en el futuro. Principalmente, en los dos equipos tucumanos que compiten en ligas nacionales que ya suspendieron las presentes temporadas. Por un camino distinto transita la actividad local, a la espera de retomar los entrenamientos con pelota y con la fe de disputar algún torneo en lo que queda del año. Todo depende de la pandemia.
Monteros Voley y Tucumán de Gimnasia, antes de declararse el aislamiento social, tenían a sus planteles de primera caballeros la Liga de Voleibol Argentino (LVA) y en el Torneo Argentino de Clubes, respectivamente. En abril, con diferencias de días, la Asociación de Clubes Liga Argentina de Voley (Aclav) y la Federación del Voleibol Argentino (Feva) dieron por finalizada la temporada 2019/2020 sin campeones.
Ambos se apoyaron en los entrenamientos por aplicaciones virtuales, al principio, y ahora se valen de las flexibilizaciones protocolares para gimnasios de manera que los jugadores puedan realizar el entrenamiento físico en sus clubes.
La novedad más impactante viene desde el sur tucumano, ya que Marcos Blanco dejará de ser el técnico, pero no se desligará de Monteros Voley. El DT, que debutó en la LAV, por cuestiones personales aprovechará este tiempo de incertidumbre para poner en orden otros aspectos.
El asesoramiento para seguir con el crecimiento del voley en la institución será de Blanco. Incluso, desde Monteros Voley aseguraron que, de seguir en la faz nacional, la primera opción es Blanco para volver a dirigir en Primera, es lo que le dejaron en claro Luis Árquez y Aldo Mansilla, integrantes de la Subcomisión de voley.
“Marcos es el único que puede dar continuidad al proyecto. Los entrenamientos los coordina Carlos Soria, el kinesiólogo y Matías Menchini, es el preparador físico”, especificó Lucas Frontini, capitán del equipo y activo colaborador del club. En cuanto a la LAV, no se piensa casi en ella porque antes hay que solucionar cuestiones a cómo quedarán las finanzas tras la pandemia. Con mucho optimismo, desde la Aclav, pusieron a octubre como mes de inicio de la próxima temporada.
Similar es lo que vive Tucumán de Gimnasia. “Más que en lo deportivo, el problema es económico. ¿Cómo se puede gestionar algo de dinero en medio de todo este lío?”, reflexionó Marcelo Díaz. El técnico de “El Lobo”, además de hacer el seguimiento de los trabajos físicos, está al tanto de los pasos administrativos que la Feva da. “Se está hablando de hacer un torneo con 24 equipos. El año pasado había 14 y se sumarían los de la Liga B1 que no se jugaría”, detalló Díaz. El poco trabajo que pueden hacer, lo realizan pensando en un posible torneo de la Federación Tucumana de Voley (FTV). La institución está a la espera de la aprobación del protocolo que presentaron ante el Comité Operativo de Emergencia (COE).
Según explicó José Luis Mendoza, presidente de la FTV, de autorizarse las recomendaciones habría que esperar un mes para competir. “Es lo que pidieron los cuerpos técnicos para, mínimamente, estar bien en lo físico y en el juego. Quedaría tiempo para jugar un sólo torneo”, afirmó Mendoza.