"La cuarentena genera una mayor sensación de incertidumbre y angustia, y eso hace que haya menos ganas de moverse y más ganas de comer alimentos poco saludables, se ingiere bebidas con alcohol y azucaradas, y se fuma más", advirtió Francisco D'Onofrio, médico especialista en nutrición.

Tambien contó que mediante las consultas virtuales que realizan desde el Siprosa "los pacientes con hiperobesidad manifestaron que están deprimidos o agresivos, más recluidos en sus casas".

Pacientes con esa patología coincidieron con la mirada del especialista y agregaron que sufren discriminación no solo en la sociedad sino también en el propio sistema sanitario.