Los casi 65 millones de habitantes del Reino Unido viven una suerte de experimento científico y social a escala colosal. Se trata de la “inmunidad del rebaño”, una estrategia emprendida por el Gobierno conservador de Boris Johnson que, a contra mano del resto del mundo, consiste en mantener abiertos buena parte de los establecimientos y permitir las reuniones públicas. “El plan es dejarnos contagiar porque cuando el 60% de la población lo haya tenido (al virus), se generaría una inmunidad en manada”, explicó Viviana Rohmer, una tucumana que reside en Londres.
La estrategia británica ha producido perplejidad no sólo entre sus habitantes, sino entre las máximas autoridades sanitarias del mundo. “Pondrá al servicio de salud bajo un peligro adicional y arriesga más vidas de lo necesario”, han afirmado 229 científicos del Reino Unido por medio de una carta abierta dirigida al primer ministro.
Ayer, la nación insular confirmaba 14 nuevos decesos por coronavirus. Así, elevaba a 35 el número de fallecidos y a casi 1.400 la cantidad de contagios.
Desde la óptica tucumana
“La sociedad sigue casi exactamente igual. Sólo se ve un poco menos de gente en la calle. El mayor cambio es la falta de turismo”, graficó a LA GACETA Pedro Soria Cano, un tucumano que reside en la capital inglesa desde hace cuatro años. “En algunos negocios, se han anunciado recortes horarios para el personal, pero los pubs siguen funcionando igual. Se sigue viendo acumulación de gente”, acotó.
A Paula Fabiana Soto, una ingeniera en Computación de la UNT que también vive en Londres, le llamó la atención “la gente muy relajada” en los bares, mientras que en la Argentina -comparó- todas las reuniones estaban siendo suspendidas. “Me sorprende que (las medidas del Gobierno) sean tan diferentes al resto de Europa. (Johnson) está siendo muy criticado”, relató en diálogo con este diario.
La profesional tucumana destacó que, a pesar de la relativa calma de la población por la postura oficial, algunos estantes de los supermercados ya se encuentran vacías. “Se ven todo tipo de reacciones: gente muy relajada y gente con pánico que compra hasta desabastecer”, expuso. En similar sintonía, Soria Cano relató: “en los súper sí se ven góndolas vacías, pero no se siente miedo ni susto generalizados”.
El Gobierno británico espera que el pico de contagios ocurra entre mayo y junio. Mientras, las autoridades sanitarias han solicitado a la población que, en caso de presentar síntomas leves de coronavirus, permanezcan en sus casas durante al menos una semana.
La atención médica
“Creen que el punto máximo (de transmisión local) será en 14 semanas. Quieren demorarlo hasta después del pico de la gripe, que es en abril, para que los hospitales estén más desocupados”, indicó Rohmer. Agregó: “no van a hacer el test. Si los síntomas duran más de de cinco días o empeoran, hay que llamar a las líneas de salud pública”.
La tucumana finalizó su mensaje con una cita a la famosa frase británica que, traducida al español, significa “mantén la calma y sigue adelante”. “No creen que cerrar las escuelas sea efectivo y tampoco creen que es sustentable cambiar nuestras vidas por tres meses. Todo sigue bastante normal; aplican la filosofia de ‘keep calm and carry on’”. La consigna fue acuñada en 1939 por el Gobierno británico para elevar la moral de la ciudadanía frente al inicio de la Segunda Guerra Mundial. Hoy, más de 70 años después, su aplicabilidad crece por el avance de la pandemia.
Soto coincidió con Rohmer: “los casos sospechosos ya no son testeados. Te dicen que te autoaísles durante una semana (en otros países es por 14 días). Sólo si los síntomas son graves tenés que llamar a la ambulancia, por lo que no se puede saber con exactitud cuántos casos hay en realidad”.
Resignado: sin medidas para frenar el virus
El primer ministro británico, Boris Johnson anunció que no se tomarán medidas drásticas (suspender vuelos y eventos, cierre de fronteras y cuarentenas) y muchos ya lo acusan de sacrificar a los más vulnerables. Incluso, ordenó que se deje de hacer la prueba a quienes registren síntomas más severos de la infección, y que el resto se limite a quedarse en sus casas durante una semana. “Muchos vamos a perder en las próximas semanas y meses a nuestros seres queridos”, dijo Johnson, para justificar que priorizará que no se afecte el curso de la economía, pensando en los que sobrevivan.
Aislada: ministra de salud, en cuarentena
La ministra de Salud de Gran Bretaña, Nadine Dorries, está confinada desde el 11 de marzo, después de haber dado positivo en coronavirus. Dorries se sumó así a los 382 casos registrados en el país, que tiene seis muertos. La funcionaria, que impulsó la legislación para enfrentar el coronavirus, cayó enferma el viernes 6 y confirmó el diagnóstico y quedó en aislamiento. En la primera semana de marzo, Dorries, de 62 años, estuvo trabajando en el Parlamento y en el Departamento de Salud Social. Antes, asistió a un evento organizado por el primer ministro, por el Día de la Mujer.
Números: aumentaron los casos en un 29%
El número de casos confirmados de coronavirus en Reino Unido había aumentado en 29% hasta el viernes y son 35 los muertos por coronavirus. “Hay unos 1.372 casos identificados en Reino Unido y hay más de 20 pacientes en unidades de cuidados intensivos”, dijo el asesor científico jefe del gobierno, Patrick Vallance. “En términos del número total, es probable que haya entre 5.000 y 10.000 personas infectadas”. Añadió que Gran Bretaña está en una trayectoria de cuatro semanas detrás de Italia, que ha reportado más de 15.000 casos y 1.000 muertes.
Inmunidad: la economía por encima de la salud
Mientras el resto de países cierran fronteras y evitan la circulación de las personas para que el virus no se propague, el primer ministro británico, Boris Johnson, eligió priorizar economía y la normalidad del país y no tomar medidas para evitar la multiplicación de contagios. Cuantas más personas se contaminen ahora, un mayor porcentaje tendrá inmunidad para una segunda oleada de la epidemia en el otoño o invierno próximos, dice la teoría. Eso implica que más de la mitad de los habitantes del Reino Unido se va a contagiar. De esta manera se conseguiría la “inmunidad de rebaño”.
Sin fiesta de San Patricio: Irlanda cierra los pubs hasta el 29 de marzo
El Gobierno de Irlanda ordenó el cierre de todos los pubs desde anoche y hasta, por lo menos el 29 de marzo, para intentar frenar el contagio del nuevo coronavirus, con lo que no celebrará la fiesta de San Patricio. El Gobierno se reunió con representantes de la patronal de bares y pubs que representan a los 7.000 establecimientos que hay en el país y pactó la medida, que se aplica a los bares y bares de hotel. Además, se emplazó a la población a no organizar ni participar en fiestas privadas, una medida de importancia dada la cercanía del Día de San Patricio, que se celebra mañana. Ayer, el Gobierno confirmó 40 nuevos casos, con lo que suman ya 169 en total. En Irlanda del Norte hay otros 45 casos. (Reuters)
Grupos de riesgo
El coordinador del gobierno británico para el coronavirus, Chris Whitty, explicó que todos los fallecidos en las últimas horas pertenecían a grupos “de riesgo”. “Comprendo que este incremento en el número de muertos relacionados con el Covid-19 puedan ser causa de preocupación. La gente debería conocer cada una de las medidas que estamos tomando para salvar vidas y proteger a los más vulnerables”, afirmó.
Sistema público
La mayoría de los pacientes fallecidos en las últimas 24 horas fueron atendidos por el sistema sanitario p´publico británico y tenían enfemerdades previas o eran mayores de 60 años. Los casos de muertes se concentran en las ciudades de Londres, Birmingham y Leicester.
Cobayos de élite
El ex capitán de la selección inglesa de fútbol, Wayne Rooney, acusó al gobierno y a las autoridades de la liga inglesa de fútbol de haber tratado a los jugadores como cobayos durante el brote de coronavirus. “Para los jugadores, el staff y sus familias, fue una semana alarmante, en la que sentimos una falta de liderazgo por parte del gobierno, de la Asociación de Fútbol y de la Premier League”, hasta que finalmente se supendieron los partidos hasta el 3 de abril. “El resto de los deportes -tenis, Fórmula 1, rugby, golf y el fútbol de otros países- estaba suspendido, mientras que a nosotros nos decían que sigamos adelante”, demandó.
La víctima de 59 años
Nick Matthews, un padre de dos hijos de 59 años, es la víctima mortal más joven del coronavirus en Gran Bretaña. El hombre, que tenía problemas de salud subyacentes, murió en el Bristol Royal Infirmary, en el que ingresó poco después de regresar de unas vacaciones en las Islas Canarias. Su esposa Mary y sus hijos, Charlotte y Ben están en aislamiento hasta que vuelvan los resultados de la prueba, y han compartido la foto de Nick en Facebook con la esperanza de que la gente pueda reconocerlo, saber si han estado en contacto reciente con él y poder autoaislarse. “No quiero asustar a la gente, pero sí quiero que la gente tome precauciones adicionales”, dijo la esposa de Matthews. (Reuters-DPA)