El Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) de Pergamino, detectó la presencia de adultos de la oruga medidora en soja y, advierten que en las próximas semanas, podrían verse larvas en lotes del cultivo.
Por eso recomiendan el monitoreo permanente para evitar pasar los umbrales críticos de control y limitar pérdidas en los rendimientos.
“Atravesamos momentos claves en la soja y la aparición de insectos debe ser observada para evitar pérdidas. Luego de divisar vuelos de adultos de medidora, sabemos que en las próximas semanas tendremos larvas mayores a 1,5 centímetros y tendremos que tomar medidas para evitar pérdidas”, alertó Mariano Luna, referente de entomología del INTA.
“En términos generales, las aplicaciones de productos químicos orientados al control de plagas son realizadas por contratistas”, indicó Luna. Recalcó, a su vez, la importancia de un buen seguimiento, tanto de la plaga como del clima, sumada a una minuciosa planificación para anticiparse a los pedidos.
Asimismo, Luna destacó que el estado del cultivo, la ubicación de la plaga y las condiciones ambientales son tres factores a tener en cuenta para la decisión de una aplicación.
“El tratamiento debe llegar a la base del tercio superior y el tamaño de gota deberá adecuarse a la intensidad de viento. Si los vientos son menores a 10 kilómetros por hora (km/h) se utiliza un tamaño de mediano a fino, mientras que entre 11 y 16 km/h se recomienda un tamaño grueso, siempre asegurándose un impacto de 30 a 40 gotas por centímetro cuadrado”, explicó el especialista, al dar detalles de una correcta aplicación.