Exclusiones, críticas y polémica en Los Pumas

El miércoles por la noche, cuando en Japón ya era media mañana del jueves, tomó carácter oficial el rumor que había comenzado a circular en el ambiente un día y medio antes, pero que sonaba demasiado extremo como para ser tomado en serio: los tucumanos Nicolás Sánchez y Ramiro Moyano no iban a ser tenidos en cuenta para el trascendental partido de mañana contra Inglaterra, ni siquiera como suplentes. Después de haber marginado al wing de Lince del encuentro contra Tonga, cuando apostó por el joven Santiago Carreras, el entrenador Mario Ledesma pateó la estantería y decidió prescindir también del goleador histórico, al que había elegido como titular para el debut ante Francia. Benjamín Urdapilleta seguirá llevando la 10, y la alternativa será el ingreso de Lucas Mensa como suplente en lugar de “Cachorro”. La medida extrema del head coach sorprendió a todos, pero afectó en especial a los tucumanos que vinieron hasta Japón.

“La verdad, es una sorpresa. ‘Nico’ Sánchez sigue siendo para mí el mejor apertura de Argentina, y este partido hubiese sido muy bueno para que recupere su mejor nivel y se ponga al frente del equipo. Por lo que demostró en los últimos años, creo que se merece la oportunidad de reivindicar la calidad que tiene. Se ve que Ledesma piensa diferente. Lo mismo sobre Moyano: tal vez su actuación contra Francia no estuvo a la altura que el entrenador pretendía, pero también me sorprende”, opina Roberto Martínez Zavalía, ex presidente de Tucumán Rugby.

“Para mí, el error fundamental de Ledesma fue no darle confianza a un ‘15’ titular. Tuvo tiempo de preparar el equipo, pero no pudo sostenerlo después del primer partido. Ni siquiera después del primer tiempo contra Francia. Me parece que contra Inglaterra debía apostar por los jugadores que puso en el primer partido, ese era su equipo, y el resultado lo llevó a hacer cambios inentendibles”, es la lectura que hace Alfredo Terraf, de Los Tarcos. “A ‘Nico’ Sánchez le quitó toda la confianza y al segundo partido lo mandó al banco. Lo mismo con Ramiro, que antes del partido contra Francia estaba considerado entre los mejores wings del mundo y acá apenas le dio el primer tiempo del primer partido. A los dos minutos del segundo tiempo lo sacó de la cancha y también del equipo. Insisto: si le daba confianza al mismo equipo con el que empezó, no tengo dudas de que podíamos ganarle a Inglaterra”, completa.

Junto a él viajó Juan Carlos López, a quien se sabe no le van los medios tonos. El ex entrenador de los “Rojos” nunca ocultó su desdén hacia Ledesma, a quien considera soberbio y autoritario. “La culpa es totalmente de él, que no fue capaz de sostener un equipo. Tuvo tiempo para trabajar, pero llega a un Mundial y a la primera de cambio lo saca a Agustín Creevy, un jugador que fue capitán durante varios años y que siempre llevó el equipo adelante. Y también lo saca a Nicolás y a Ramiro. Eso es no darle confianza a sus jugadores. ¿Acaso es casualidad que Pablo Matera no se esté destacando? ¿Es casualidad que Matías Orlando no esté en su mejor nivel, cuando tuvo una regularidad increíble todo el año? ¿Es casualidad que Jerónimo de la Fuente esté tan bajo? No. Eso es culpa de este tipo, que ya empezó equivocándose al tacharlo públicamente a Gonzalo Quesada de su staff, después de la gran temporada que había hecho con Jaguares. Ganarle a Inglaterra en estas circunstancias sería un milagro; gracias a Dios que los milagros existen”, agregó “El Pavo” López, que le dedicó duras palabras al entrenador en sus redes sociales.

“Los está arruinando de la cabeza a los jugadores”, entiende Fernando Egloff, de Tucumán Rugby. “Por lo menos debería haberles dado una oportunidad más y ponerlos contra Tonga. Ramiro no jugó tan mal como para sacarlo del equipo, y a Sánchez, del que él mismo decía que era uno de los mejores 10 del mundo, ni al banco lo manda. No sé qué va a hacer si se lesiona Urdapilleta. A lo mejor sabe mucho de rugby, pero la parte psicológica de un jugador también influye mucho”, advierte.

A Julio Varela, le parece muy arriesgado prescindir de Sánchez en este partido. “No hay otro apertura natural, y contra Inglaterra necesitaremos una buena defensa, virtud que Nico tiene y Urdapilleta no. Recordemos el tackle que falló el sábado y que nos costó un try en contra. También me sorprendió lo de Creevy, pensé que lo estaba guardando para Inglaterra, pero la verdad es que Julián Montoya viene en un nivel altísimo y se ganó su oportunidad”, opina el de Aguilares.

Como hombre de Lawn Tennis, a Diego Carrizo le duele particularmente la exclusión de Nicolás. “Sin dudas que duele la decisión. ‘Nico’ fue el goleador del último Mundial, es el goleador histórico del seleccionado y no se merece quedarse afuera de un partido tan importante como este, en el que se juega la clasificación. Se ha entregado siempre a esta camiseta, y por eso merecía esta oportunidad. Esperemos que igualmente las cosas salgan bien para Argentina y que podamos pasar a la siguiente fase”, explicó Carrizo.

Dos cambios basados exclusivamente en el criterio técnico de Ledesma

Finalmente, la revelación del equipo confirmó la polémica decisión de dejar afuera a Nicolás Sánchez y Ramiro Moyano, una más de las varias que ha tomado el entrenador, Mario Ledesma, en este último tiempo. En la sala de prensa del estadio de Fukuoka, donde Francia enfrentó a EE.UU, un periodista de París me comentó que no podía entender cómo es que Facundo Isa y Juan Imhoff no estaban en Japón con Los Pumas. Le respondí que yo tampoco, al igual que muchos argentinos.

Con la decisión de dejar fuera hasta del banco a los dos tucumanos pasa lo mismo. Eso sí: cualquier juicio de valor debe hacerse bajo la salvedad de que el entrenador es quien comparte el día a día con ellos, y conoce mejor que nadie la situación y las estadísticas finas de cada uno, y por ende sus elecciones pueden explicarse por cuestiones que sólo él y su staff conocen; sin embargo, nadie esperaba que Ledesma llegase al extremo de prescindir totalmente de dos piezas de la jerarquía de Sánchez y Moyano -a quienes él mismo había ungido como titulares contra Francia- para afrontar un partido en el que deberá derrotar a un equipazo como el de Inglaterra para no quedar eliminado con un partido aún por disputar.

El criterio de Ledesma es puramente técnico, ya que ambos están en perfectas condiciones físicas para jugar. A Moyano apenas le dio chance: lo “limpió” con apenas 45 minutos de juego contra Francia. Es cierto, Ramiro no tuvo un buen primer tiempo, pero el resto del equipo tampoco, y difícilmente puede un wing generar quiebres y ocasiones de try si la pelota no le llega porque no hay tres pases seguidos o porque la tiene el rival. Algo parecido a lo que le sucedió a Santiago Cordero en el casting premundialista. Entonces, da la impresión que el de Lince fue el chivo expiatorio de ese catastrófico primer tiempo en el debut. Nadie discute las condiciones de Carreras, el cordobés es un crack, pero también es cierto que la actitud con la que salieron Los Pumas en el segundo tiempo ante Tonga le dio muchas más oportunidades de las que dispuso “Rama”.

Lo de Sánchez es todavía más difícil de comprender. Que esté por debajo de su nivel -mal que nos pese a los tucumanos- , pero de ahí a borrarlo de los 23 y poner en su lugar nada menos que contra Inglaterra a Lucas Mensa, talentoso pero cuya experiencia con Los Pumas se reduce a un amistoso contra Sudáfrica, es irse al extremo. Además, es un lujo que Argentina no puede darse en cuestión de aperturas: “Cachorro” y Urdapilleta son los únicos naturales que tiene este plantel. Las alternativas son centros que pueden jugar de apertura, pero que jamás han ocupado esa posición en este equipo. Por caso, Jerónimo de la Fuente, quien pasará a ocupar el lugar de Urdapilleta en caso de que este no pueda completar los 80 minutos, sea por desgaste o por lesión, y le dejará el suyo como primer centro a Mensa, mientras que Emiliano Boffelli se encargará de los kicks a los palos. Para caer en estos experimentos, mejor lo hubiera traído a Joaquín Díaz Bonilla en lugar de Juan Cruz Mallía.

Por supuesto, también es posible que la jugada le dé resultado a Ledesma y Los Pumas logren dar el golpe. En ese caso, Ledesma se habrá ganado una buena cuota de crédito. Sin embargo, si el resultado es adverso, muchas voces se alzarán en su contra. Él lo sabe mejor que nadie.

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