En lo que fue su agenda de seis horas en la ONU (Organización de Naciones Unidas), en Nueva York, el presidente, Mauricio Macri, participó de la reunión con el FMI, dio su discurso contra Irán en la Asamblea, almorzó con jefes de Estado y finalmente mantuvo un encuentro cumbre con la ex presidenta de Chile y actual Comisionada de Derechos Humanos de la ONU, Michele Bachelet, para tratar la crisis institucional en Venezuela.
Sin reuniones con banqueros e inversores de Wall Street como antes, el Presidente se sumó al encuentro de Hernán Lacunza, su ministro de Hacienda, y de Guido Sandleris, titular del Banco Central, con los representantes del FMI: David Lipton, director interino, y Alejandro Werner, director para el Hemisferio Occidental del Fondo.
Durante la reunión, la delegación oficial y la comitiva del FMI acordaron que Lacunza y su gabinete vuelvan el próximo 14 de octubre a Washington para protagonizar una reunión técnica junto a Roberto Cardarelli, jefe de la misión del Fondo para Argentina. En este contexto, Macri, Lacunza y Sandleris deberán seguir esperando por el desembolso de U$S 5.400 millones que se esperaba para mediados de septiembre. Se trata de una decisión del board del FMI que excede a la línea burocrática que representan Lipton, Werner y Cardarelli.
Al final, Lipton calificó la reunión de “constructiva”, sobre todo con el presidente Macri, y dijo que continuarán colaborando para responder a “los tiempos desafiantes que se avecinan”.
El Presidente fue invitado por Antonio Guitierres, secretario general de la ONU, a un almuerzo protocolar con sus colegas que participan en las sesiones de la Asamblea General. Macri tiene recuerdos agridulce de este encuentro que se repite todos los años: una vez se cruzó con Teresa May -ex premier británica- y después aseguró a los periodistas que habían hablado sobre la soberanía de las Islas Malvinas. No fue cierto, y generó una polémica fugaz con el Reino Unido. Ayer, luego de la comida, Macri se reunió con Bachelet, a quien manifestó su apoyo por el informe sobre la violación de los derechos humanos en Venezuela.
El discurso
En otro momento, el Presidente argentino dio su discurso en la ONU que abarcó su pedido de incluir en la agenda global de la OMC, el tratado Mercosur-Unión Europea. Hizo un balance de su gestión en materia internacional y se refirió a la conflictiva situación que vive Venezuela. “Desde que asumí, en 2015, decidimos dejar atrás una etapa de confrontación con el mundo. En medio de un mundo complejo, decidimos asumir la responsabilidad de hacer un aporte al multilateralismo y a la búsqueda de consensos”, expresó, al deslizar una crítica a la ex presidenta Cristina Fernández.
También reclamó la soberanía sobre las Islas Malvinas y afirmó que la Argentina “mantiene su predisposición y el llamado al Reino Unido para reanudar las negociaciones bilaterales”. “Pero creamos un nuevo marco de relacionamiento con el Reino Unido y así mejoramos las condiciones para avanzar hacia una solución”, agregó. Y resaltó el proceso de identificación de los soldados argentinos sepultados en el cementerio de Darwin.
Aseguró además que “la dictadura de Nicolás Maduro a sumido a Venezuela en una crisis humanitaria sin precedentes. “El éxodo masivo de millones de venezolanos está afectando gravemente la estabilidad y gobernanza de nuestra región”, señaló.
El mandatario consideró que “el rumbo de la inserción global de un país necesita de valores que orienten la acción” y resaltó que “nuestra historia y geografía nos une a una región que valora la democracia, la libertad y los derechos humanos”.
En esa línea, afirmó: “desde el inicio de nuestro Gobierno lideramos las denuncias contra la violación de derechos humanos en Venezuela”. Además, alertó sobre el crecimiento del terrorismo iraní en la región con la presencia de operaciones de lavado de dinero y células dormidas de Hezbollah en la Triple Frontera. Y pidió a Irán “ que coopere con las autoridades argentinas” para avanzar en la investigación del atentado a la AMIA, ocurrido en 1994.
Macri también mencionó, en lo que muchos consideraron su último discurso en la ONU, su apoyo institucional al Acuerdo del Cambio Climático de París.
Al cabo de seis horas en la ONU, Macri se subió al auto oficial y cruzó Manhattan para encontrarse con Donald y Melanie Trump en el hotel Palace, donde se realizó un cóctel protocolar que el presidente de EEUU y su esposa ofrecieron a los jefes de Estado que llegaron a New York para la Asamblea de la ONU.
Al final del cóctel, entrada la anoche, Macri se trasladó hasta el aeropuerto de Teterboro -a 20 km de Central Park- para embarcarse rumbo a Buenos Aires. (Infobae/Télam)
Respuesta a Greta: Faurie y el cambio climático
El canciller Jorge Faurie aseguró que la Argentina “tiene una actitud de contribución” para reducir los daños provocados por el cambio climático, en respuesta a las críticas de activistas juveniles. “Hay que poner en perspectiva correcta” las afirmaciones de “adolescentes y jóvenes que tienen una gran preocupación frente al mundo que va a haber más adelante pero en ese rol Argentina tiene realmente una actitud de contribución para un país que es bajo contaminante en comparación con países desarrollados”, sostuvo el canciller a radio Mitre. Faurie respondió así críticas de la activista sueca Greta Thunberg en la Cumbre de Acción Climática sobre una supuesta inacción de Argentina ante las consecuencias del cambio climático. El diplomático, que acompaña a Macri, adelantó que el jefe del Estado incluirá en su discurso “la tarea que el país ha llevado adelante en materia de cambio climático y las contribuciones que hechas en ese sentido”. Un grupo de jóvenes había denunciado que la Argentina, Brasil, Francia, Alemania y Turquía no hacían nada frente a los eventos extremos y la suba promedio de la temperatura global. (Télam)
Justifican lo que hizo el FMI: opiniones de Lagarde y de Anne Krueger
La ex directora gerente del FMI, Christine Lagarde, declaró ayer que el organismo internacional “hizo lo mejor que pudo” en Argentina. La encargada de negociar el crédito stand by de U$S 57.000 millones con el ex ministro Nicolás Dujovne, renunció para reemplazar en noviembre a Mario Draghi como presidente del Banco Central Europeo. La economista francesa dedicó esas pocas palabras sobre la actual situación del país a Bloomberg TV. Por su lado, otra ex subdirectora gerente del FMI durante la crisis de 2001, Anne Krueger, opinó que Macri “sabía que había heredado una economía enferma cuando asumió el cargo en 2015”, pero “falló en tomar su medicina”.
Nielsen salió a responder: criticó a la economista estadounidense
Guillermo Nielsen, el economista y ex secretario de Finanzas entre 2002 y 2005, y uno de los nombres que se menciona con fuerza para el eventual gabinete económico de Alberto Fernández, salió a cruce de los dichos de las ex gerentas del FMI. “Lo mal que estamos para que Anne Krueger vuelva a opinar, con su sesgo de siempre, sobre la Argentina. Nadie en el mundo puede creer la ineptitud del gobierno de (Mauricio) Macri y de sus economistas, que nos volvieron a llevar a una crisis económica profunda”, expresó en sus redes sociales. “Más gradualismo solo prolongará el dolor y permitirá que aumente la oposición política”, había afirmado Krueger sobre los ajustes.