“Tenemos que usar como cimiento el rendimiento que mostramos contra Argentinos. En ese partido jugamos bien y sólo nos faltó convertir. Ese es el camino”. La palabra de Favio Orsi luego del juego por Copa Argentina dejaba un mensaje subliminal pensando en el debut “santo” por la Primera Nacional. Los entrenadores habían quedado muy conformes con el nivel que había mostrado el equipo y, salvo algún problema de último momento, tenían pensado repetir formación en el juego contra Villa Dálmine.

Y eso finalmente sucedió. Orsi y Sergio Gómez aguardaron la recuperación física de sus jugadores y ayer, confirmaron que no modificarán casi nada. ¿Por qué casi nada? Porque si bien los “11” nombres se repetirán con respecto a los que estuvieron el pasado miércoles en el “Padre Martearena”, los entrenadores quieren un equipo más vertical para el duelo de esta tarde.

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El 4-3-3 tampoco se modificará. Juan Mercier será el eje del medio y tendrá como laderos a Matías Fissore y Claudio Mosca; pero los extremos, Gonzalo Rodríguez y Nicolás Castro tendrán más libertadores para intentar asociarse a Ramiro Costa, la referencia de área.

“Hay que atacar y lastimar”, pidieron los DT sabiendo que el primer paso es clave. En La Ciudadela pretenden ser animador del certamen desde el minuto cero y para eso trabajan. El equipo mostró un buen nivel por Copa Argentina, pero ahora debe ganar; por eso Orsi y Gómez apuntalaron ese mensaje.