La “Roya Asiática de la Soja” (RAS), causada por Phakopsora pachyrhizi, es una de las enfermedades más importantes del cultivo, ocasionando severas pérdidas en la última campaña. “Nuestro grupo de trabajo llevó a cabo un estudio orientado a caracterizar, mediante marcadores moleculares, la diversidad genética y la estructura poblacional de aislamientos de P. pachyrhizi provenientes de distintas ubicaciones agroecológicas de Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay. Con el propósito de entender la capacidad para vencer la resistencia otorgada por genes mayores presentes hasta el momento en las variedades comerciales de soja”, explicó durante su exposición, Carla Rocha, de la Sección Biotecnología de la Eeaoc.
Los resultados obtenidos mostraron que “el patógeno posee una elevada variabilidad genética” y que “ocurren cambios genéticos entre años consecutivos dentro de la misma región”. Este estudio ha permitido sugerir estrategias, como el apilamiento de genes de resistencia y la búsqueda de resistencia poligénica, bajo un marco integrado y sustentable, donde “la resistencia genética constituye la herramienta más efectiva y económica para el control de la enfermedad”.