Tal como ocurrió en la Copa América que en 2015 se jugó en Santiago del Chile, la familia de Roberto Maximiliano Pereyra volvió a decir presente, esta vez en el estadio Arena Fonta Nova.
Una comitiva compuesta de 80 personas, todas familiares de los integrantes de la Selección nacional viajó por la mañana en un charter especial que dispuso la Asociación del Fútbol Argentino, a Salvador de Bahía para estar en el debut del seleccionado ante los colombianos. Entre los viajeros estaban la esposa de “Maxi”, Carolina, sus padres, Leónides y Rosa, y su hermano, Facundo. “Maxi” arrastra una lesión pero ayer estuvo en el banco, de todas maneras.
“Desde el mismo momento que ‘Maxi’ nos confirmó que estaba en la lista definitiva de la Selección empezamos a planificar el viaje. Todo el tema se simplificó cuando él nos confirmó que la AFA iba a poner un avión especial para que viajemos. Lo primero que hice fue conseguir permiso de mi trabajo, algo que gracias a Dios conseguí”, señaló Leónides, que siente un enorme orgullo que su hijo vuelva a defender la casaca nacional.
A “Leo” le cuesta darse cuenta todas las emociones encontradas que vive junto a la familia desde aquel 11 de octubre de 2014, cuando “Maxi” debutó en la Selección, en aquel equipo que le ganó 2-0 al seleccionado de Brasil, bajo la conducción técnica de Gerardo “Tata” Martino. “En estos momentos, observando este estadio imponente, me vienen a la memoria aquellos tiempos en la década del 2000, cuando sabía llevarlo a él y a Diego, mi otro hijo, a las prácticas de las inferiores de UTA. Uno siempre es optimista en cuanto a las condiciones de su hijo, pero lo que ‘Maxi’ hizo en estos años no lo contamos ni en los sueños”, dijo.
Otro que vivió con mucha emoción esta nueva oportunidad de estar junto al ídolo de la familia fue Facundo, el menor de los hermanos que por nada del mundo quería perderse esta oportunidad de estar junto a él.
“Sabemos del esfuerzo que ‘Maxi’ hizo para que esté viviendo este presente. A los 15 años dejó nuestra casa para empezar una carrera futbolística que hoy nos enorgullece haya concretado. Estamos muy felices porque aunque todavía no tuvimos contacto, nos comentó de la alegría que tiene porque estemos junto a él. Posiblemente, mañana (por hoy) podamos juntarnos. Hace mucho que no lo vemos personalmente. Mi vieja es la más ansiosa de poder reencontrarse con él”, señaló Facundo, que es como un clon de su hermano.
Pensando en la final
Según lo que pudimos conocer, todos los familiares de los futbolistas tendrán la posibilidad de quedarse en Brasil hasta la finalización de la participación del equipo argentino en la Copa América.
“Dios quiera que podamos quedarnos hasta el partido final. Nos encantaría que podamos observar cómo Argentina levanta la Copa y máxime teniendo en ese grupo a mi hermano”, señaló Facundo.
El resto de la familia Pereyra vivió el debut del equipo nacional reunido en la casa paterna, ubicada en Barrio Soeme. Los amigos del ídolo también dijeron presente a la cita. Una tarde de muchas emociones.