Desconocidos violentaron puertas y todo a su paso. Así, robaron ayer en el Museo Ferroviario Talleres de Tafí Viejo. Entre los objetos sustraídos, se llevaron la bicicleta que Héctor “Etín” Manca había donado como forma de continuar con su “campaña de vida”: generar conciencia sobre la donación de órganos.
El ciclista trasplantado participó en la recordada carrera del rural bike en las tierras del limón, en 2010, y concretó en 2012 la travesía “De la Casa Histórica al Cabildo en Bicicleta” -en esa oportunidad, recorrió alrededor de 1.200 kilómetros con otro rodado-. Tras hacer realidad otros anhelos durante los últimos años, Manca decidió ceder a su “vieja compañera de aventuras” al establecimiento. “Decidí restaurar la bicicleta y donarla al Museo Ferroviario porque, con ella, volví a hacer actividad física luego de mi trasplante hepático de 2003. La bauticé ‘La 3.025’, en honor a todos los ferroviarios”, recordó el hombre, de 56 años.
Los atacantes, además de la bici, se alzaron con antiguos accesorios de reparación y placas de locomotoras (numeraciones) que pesan un kilo cada una, aproximadamente. Muchos de esos objetos eran de bronce, según informaron referentes del Museo. “Esa calidad de bronce no se consigue ahora. Fue un robo apurado y en la oscuridad. No llegaron a prender las luces, al parecer, porque ningún foco estaba encendido. Además, había una placa más grande en el salón, pero no se la llevaron. Entendemos que entraron durante la madrugada (de ayer)”, explicó Antonio Martínez, presidente de la Asociación de Amigos del Museo de los Talleres de Tafí Viejo. Al salir, los desconocidos dejaron una barreta y otras herramientas en la puerta.
El referente realizó ayer la denuncia en la comisaría de la “Ciudad del limón”. “Entraron inclusive a los dos galpones del predio. Los ferroviarios están cansados de los robos. Al museo no habían ingresado”, añadió.
Una víctima
En noviembre del año pasado, “Etín” Manca y su novia Marisel Espíndola, sufrieron un violento robo en la senda de la cumbre de El Taficillo. Un grupo de personas interceptó a la pareja y le sacó las bicicletas a punta de pistola. Luego, la Policía recuperaría los elementos. “Me enteré hace dos semanas de que liberaron a dos de los cinco delincuentes que estaban procesados en esta causa. Al día de hoy no logro reponerme de ese ataque. Me habían puesto el revólver en la cabeza. Por ese hecho, tuve parar el entrenamiento y postergué otras actividades. Ahora, pasa esto en el museo”, contó Manca.