El belga Victor D’Hondt murió en 1901. Dos décadas antes, el matemático y jurista había ideado un sistema de cálculos para la distribución de cargos electivos que aún está vigente. Pasó más de un siglo desde entonces, y quienes se postularán para ocupar una banca de la Legislatura a partir de los próximos comicios hacen cuentas y más cuentas siguiendo el esquema de D’Hondt. Y el interrogante se repite en las tres secciones electorales. ¿Cuántos votos se necesitarán para ser legislador?
Al margen de las variables que ofrece el sistema de reparto de escaños, el antecedente de las provinciales de 2015 y la continuidad del régimen de “acoples” les ofrece un panorama a los candidatos.
En el distrito capitalino
En la Capital, que cuenta con 19 representantes en la Cámara provincial, la lista a legislador con mejor performance sacó 32.215 votos en 2015. Este techo es clave en el sistema D’Hondt, ya que marca la base sobre la cual se calculará la distribución del resto de las bancas. Así, el último en “entrar” a la Legislatura por esta sección electoral necesitó 8.053 adhesiones.
En ese entonces, la cantidad de electores habilitados fue de 422.150 ciudadanos (participaron 349.281, es decir, el 82,74%). O sea que, para lograr su objetivo, los postulantes requirieron de un mínimo cercano al 2,3% de los votos.
Según el padrón provisorio de la Junta Electoral Provincial (JEP), para los comicios del 9 de junio próximo habrá 445.194 vecinos de la Capital en condiciones de sufragar. De mantenerse el índice de participación, serán unos 368.000 electores, por lo que la variación no sería significativa en ese sentido.
También está previsto que el oficialismo, a través del Frente Justicialista por Tucumán (FJT), y los aliados a Cambiemos, con el frente Vamos Tucumán, presenten un buen número de “acoples” a legislador en San Miguel de Tucumán. Una de las novedades respecto a 2015 será la escisión del peronismo, a partir de la lista única que presentará el armado alperovichista Hacemos Tucumán.
Los armadores de este distrito se plantean dos escenarios posibles. En el primero, se mantendría el “techo” cercano a los 30.000 votos, fijado por la nómina con mejores resultados; en este caso, harían falta poco más de 8.000 boletas para ser legislador. La otra alternativa es que el máximo obtenido por una lista se aproxime a los 50.000 votos, con lo que serían unas 9.500 adhesiones para asegurarse un escaño. Para evitar riesgos, los postulantes consultados por este diario confiaron que tienen en mente esa última cifra, sobre todo porque una eventual buena cosecha de la segunda lista más votada elevaría el “piso”.
Hacia el oriente
En 2015, la lista a legislador más votada en el Este obtuvo 74.353 de los 215.259 sufragios positivos. Para alcanzar la última de las 12 bancas por esta sección fueron necesarios 10.600 votos. De los tres, este es el distrito donde mejores resultados suele conseguir la lista oficial. Pero sus rivales y sus propios “acoples” tratarán de romper la hegemonía. Por lo pronto, si la fragmentación surte efecto y el armado más exitoso reúne 60.000 adhesiones, el “piso” para entrar a la Cámara será de 10.000 votos. En caso de que algún espacio supere el tope de los últimos comicios y deje una base de 80.000, se necesitarán entre 12.500 y 13.500, según la cosecha de quien resulte segundo.
Hacia el occidente
Con 18 bancas en pugna, el Oeste es la sección con más electores de la provincia. En 2015 participaron 363.579 ciudadanos (el 83,6% del padrón): la lista más eficaz logró 74.673 votos, y el último legislador ingresó con 10.753. En esta fracción electoral es donde más fortalezas muestran los “acoples” del oficialismo. Si las diversidad de la oferta de candidatos hace “caer” el piso y el máximo obtenido por un armado ronda los 70.000 sufragios, se necesitarán unos 11.000 votos para obtener la banca “18”. En cambio, si aquella marca asciende a 90.000, el último legislador por el Oeste requerirá 12.500 boletas. Como en los demás casos, el resultado del segundo mejor también modifica la cifra del mínimo para entrar. Todo esto, siguiendo con los cálculos heredados del belga D’Hondt.
Datos y cifras | A tener en cuenta
1.226.117
electores habilitados en Tucumán figuran en el padrón provisorio de la Junta Electoral.
445.194
votantes están en condiciones de sufragar el 9 de junio en San Miguel de Tucumán.
292.794
electores habilitados tiene la sección electoral Este, según el padrón provisorio.
488.129
ciudadanos de la sección Oeste fueron incluidos en el padrón provisorio, con miras a los comicios.
625.452
mujeres están habilitadas para sufragar en los próximos comicios, según el padrón provisorio.
600.665
hombres podrán votar el 9 de junio en Tucumán, según los datos de la Junta Electoral.
185.522
votos obtuvo la fórmula Manzur-Jaldo en 2015; así, consiguió el 52,63% de las adhesiones.
128.543
votos consiguió la fórmula Cano-Amaya en esos comicios; es decir, el 36,46% de los sufragios.
El D’Hondt
Un ejemplo con 1.000 votantes hipotéticos
El sistema D’Hondt permite obtener el número de cargos electos asignados a las candidaturas en proporción a los votos obtenidos por cada lista. Un ejemplo con un total de 1.000 electores, 10 bancas y cinco fuerzas en pugna: si la “A” saca 500 votos, obtendría cuatro bancas; la “B”, con 400, tres; la “C”, con 300, dos; y la “D”, con 200, una. La “E”, con 100 votos, no alcanzaría ningún escaño. El mínimo para lograr un lugar en este esquema serían 125 votos, debido al cálculo sobre el coeficiente obtenido por la lista “A”.
Lista única
Un espacio reunido por un único sello
Los partidos pueden optar por participar con una lista única, que postule desde gobernador e intendentes hasta legisladores, concejales y comisionados rurales. Aplicarán esta estrategia Hacemos Tucumán, del alperovichismo, Fuerza Republicana, del bussismo, y los partidos de izquierda. Si bien este esquema “nutre” de votos a las listas a legisladores, tiene como contrapartida que la fórmula a gobernador o el postulante a la Intendencia no cuenta con fuerzas aliadas (los “acoples”) que le aporten sufragios extra.
“Acoples”
Diversos espacios, un solo gobernador
La Constitución provincial habilita las alianzas entre partidos para que, por ejemplo, dos o más listas de candidatos a legislador sumen votos a un mismo aspirante a la Gobernación. El PJ, englobado por el Frente Justicialista por Tucumán, apostará por esta estrategia, sobre todo en la Capital. En el Este y el Oeste suele haber más fichas puestas en la lista oficial, aunque el PJ tiene aliados de peso, como “Acción Regional” o “Tucumán Innovador”. “Vamos Tucumán”, de Cambiemos, usaría los “acoples” sólo en la Capital.
Por sección
Los departamentos, en tres fracciones
El Poder Legislativo es unicameral, y está integrado por 49 legisladores desde la última reforma de la Constitución provincial (antes eran 40). La representación corresponde a tres secciones electorales: la Capital (San Miguel de Tucumán), con 19 bancas; el Este (incluye los departamentos Graneros, Simoca, Leales, Cruz Alta, Burruyacu y Trancas), con 12 escaños; y el Oeste (reúne los departamentos de Lules, Famaillá, Monteros, Chicligasta, Río Chico, Alberdi, La Cocha, Tafí Viejo, Yerba Buena y Tafí del Valle) con 18 bancas.
Circuitos
Una subdivisión por razones operativas
Si bien no afecta el sistema de representación, las tres secciones electorales de la provincia están subdivididas a su vez en circuitos. Sobre todo en la Capital, estas fracciones permiten a los dirigentes una distribución relativamente ordenada de los territorios. Sin embargo, las disputas por los circuitos pueden llevar a un clima de tensión incluso a fuerzas aliadas. Desde lo operativo, sirven además a la Junta Electoral para ubicar las mesas de votación y asignar a los ciudadanos las escuelas más cercanas a su domicilio.
Provinciales
La Junta ya habilitó a 89 partidos
En 2018 la Legislatura sancionó una ley que dispuso la eliminación de los partidos municipales y comunales. De esta forma, sólo quedaron en pie los provinciales y los de distrito. Según el último informe oficial de la Junta Electoral Provincial, publicado el 22 de marzo pasado, en Tucumán hay 89 partidos habilitados para competir el próximo 9 de junio. Muchos de ellos participarán como “acoples” de un mismo candidato a gobernador, tanto de la fórmula oficialista Juan Manzur-Osvaldo Jaldo como de algunos armados opositores.
Requisitos
La edad necesaria para ser candidato
Para ser candidato a gobernador y vicegobernador se requiere ser argentino, tener al menos 30 años de edad y dos años de residencia inmediata en la provincia y de ciudadanía en ejercicio. Para legislador, la Constitución provincial exige un mínimo de 25 años de edad y dos de ciudadanía en ejercicio; y “estar en la provincia en forma interrumpida por lo menos dos años antes del acto eleccionario que lo designe”. Para intendente, el mínimo es también de 25 años; para concejal, 22; y para comisionado rural, 21.
El árbitro
La nueva integración de la JEP
El órgano con competencia sobre los comicios del 9 de junio es la Junta Electoral Provincial (JEP). A partir de la reforma legal aplicada en 2018 por la Legislatura, está integrada sólo por funcionarios del Poder Judicial provincial. La presidencia está a cargo del titular de la Corte Suprema de Justicia de Tucumán (en la actualidad, el magistrado Daniel Posse). Los vocales son el ministro Fiscal (el jefe de los fiscales es Edmundo Jiménez) y el ministro de la Defensa (a partir del año pasado, Washington Navarro Dávila).