No hay más subsidios al transporte de pasajeros que lo acordado. Ni un peso más. Tan tajante como enfático ha sido la respuesta que el ministro de Transporte de la Nación, Guillermo Dietrich, le ha dado a LA GACETA, luego de que trascendiera que la Nación giraría más dinero al Gran Buenos Aires para aportarle a las empresas prestatarias del servicio, sin que éstas reclaman un incremento en el precio del boleto.
La Casa Rosada sale a cuidar a la gobernadora de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, y al jefe del gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y absorbe los $ 100 millones mensuales de aumento del sistema por alza del combustible. De esa manera, no se incrementaría el boleto, consignó ayer el diario El Cronista. Esta información encendió la alarma en la Casa de Gobierno de Tucumán, que viene reclamándole al Gobierno nacional el envío de algunas remesas mensuales acordadas en el marco del Consenso Fiscal y vinculadas con el servicio de transporte de pasajeros.
“Los subsidios de los colectivos de la Ciudad y de la Provincia de Buenos Aires los pagan las respectivas jurisdicciones”, contestó ayer Dietrich cuando LA GACETA le consultó acerca del tema. “El boleto en el área metropolitana subió 38%; el año pasado, 116%. En los aumentos de este año se contempló los incrementos de costos del período”, completó el ministro.
Desde el área a su cargo insistieron con que los subsidios son afrontados por las gestiones de la gobernadora bonaerense y por la del alcalde porteño.
Sin embargo, aclararon que “la Nación sólo pone plata en los colectivos que cruzan la jurisdicción entre ciudad y provincia, como sucede en todo el país”. Por caso, citaron los siguientes:
• El servicio que une Neuquén con Cipolletti (Río Negro).
• Los colectivos entre Resistencia (Chaco) y Corrientes.
• Los ómnibus entre Paraná (Entre Ríos) y Santa Fe.
• Las unidades que hacen el trayecto entre Carmen de Patagones (Buenos Aires) y Viedma (Río Negro);
• Los colectivos entre San Nicolás y Ramallo (Buenos Aires) y Rosario (Santa Fe).
• Los colectivos entre Apóstoles (Misiones) e Ituzaingó (Corrientes).
Desde que se conoció la información en el primer piso de la Casa de Gobierno provincial hubo quejas ante la posibilidad de que se subsidie más a dos distritos con fuerte peso electoral para Cambiemos. Al ser consultado por nuestro diario, el gobernador Juan Manzur adoptó una posición de cautela hasta tanto se interiorizara acerca de los alcances de la eventual ayuda de la Casa Rosada a dos de sus principales referentes. “No es posible que se planteen estas asimetrías en el marco de un país federal como el nuestro. Cualquier discusión debe pasar por la aplicación del principio de equidad”, contestó el mandatario.
De comprobantes y declaraciones
En el Gobierno provincial recordaron que la eliminación de subsidios se vinculó con el transporte urbano y de larga distancia. Sin embargo, reconocieron que, al hablar del servicio interjurisdiccional, es decir, aquellos colectivos que unían dos provincias, la mayoría de los gobernadores plantearon que era una cuestión no convalidada dentro del Consenso Fiscal. No obstante, el pacto Nación-provincias ya está firme.
Desde el Ministerio de Economía remarcaron que, tras la negociación por aquel consenso, se estableció que el Presupuesto Nacional 2019 contendrá una partida de unos $ 5.000 millones que serían repartidos entre todos los distritos del país, como una manera de compensar aquella quita de subsidios. En el caso de Tucumán, el aporte federal mensual debía estar en el orden de los $ 54 millones. Mientras tanto, la gestión de Manzur redactó un proyecto de ley que estableció un aporte provincial mensual de unos $ 130 millones para ayudar a sostener el esquema financiero de las empresas prestatarias del servicio, sin que ello implique un aumento en el precio del boleto.
Respecto del aporte nacional, en el Gobierno local reconocen que la Nación sólo ha girado la cuota que corresponde a febrero, pero que no lo hizo ni en enero ni en marzo pasado (una cifra que roza los $ 110 millones en total). Voceros del Poder Ejecutivo explicaron que, en esta situación, se plantearon dos argumentos desde la Nación:
• El convenio regía desde febrero y, por lo tanto, la primera cuota debía ser abonada en marzo.
• La Provincia debía demostrar que giró el dinero a las empresas prestatarias del servicio.
Aún más, desde la cartera que conduce Dietrich indicaron ayer a nuestro diario a las autoridades locales “les falta presentar el comprobante de haber transferido el dinero a las empresas”. A este argumento, la provincia contestó que se confeccionaron declaraciones juradas de las compañías (no todas están bancarizadas) en el marco de un acuerdo con la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (Aetat). Por ese motivo, el secretario de Transporte de la Provincia, Benjamín Nieva, viajará a Buenos Aires, con el fin de presentar toda la documentación y, de esa manera, se haga efectivo las cuotas vencidas y se active la operatoria para los meses subsiguientes.
El corrillo de que la Nación absorbería con subsidios extraordinarios los incrementos en el gasoil para las empresas de colectivos del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), generó indignación en los empresarios que integran la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (Aetat). “¿Qué podemos hacer con esto? Desde hace mucho tiempo nos trataron como ciudadanos de segunda. Prometieron corregir estas asimetrías cuando asumieron y nunca cumplieron. Tenemos una reunión en la Federación está semana porque en todo el interior la sensación y el malestar es similar”, planteó el presidente de Aetat, Daniel Orell. Tras la quita de los subsidios nacionales al sector, la Nación dispuso crear un fondo compensador por $ 6.500 millones para asistir a las provincias y que se nutría del Impuesto sobre los Bienes Personales. A Tucumán le corresponden unos $ 56,8 millones mensuales. El resto de los subsidios nacionales fueron absorbidos por la provincia o se os trasladó hacia la tarifa. “Nos pagaron febrero, rendimos esos fondos, nunca nos asignaron enero, marzo y abril que vence en unos días. El miércoles (por hoy), vamos a reclamar por este tema”, describió el vicepresidente de Aetat, Jorge Berreta. “Tendríamos que haber cobrado tres meses y sólo cumplieron con uno. Cambiaron las reglas sobre la marcha para perjudicarnos: modificaron la forma de rendición, que antes era cuatrimestral, a mensual sin previo aviso”, dijo Orell, quien también preside la Federación Argentina del Transporte Automotor de Pasajeros (Fatap) que nuclea a las firmas del interior.