La decisión del juez federal N°1, Daniel Bejas, de citar a prestar declaración indagatoria a Susana Trimarco, presidenta de la Fundación María de los Ángeles, se topó con que la imputada no reside en San Miguel de Tucumán. Por lo tanto, la activista antitrata aún no pudo ser notificada de manera oficial de que debe presentarse en la Justicia Federal para explicar qué sucedió con el anticipo de $ 5,6 millones (U$S 418.000 de aquel momento) que recibió del Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner para ejecutar obras públicas. Según el fiscal Carlos Brito, Trimarco no cumplió su parte del acuerdo con el Ministerio de Planificación Federal de Julio De Vido ni reintegró los fondos.
La imposibilidad de hallar a la mamá de María de los Ángeles Verón hizo fracasar la primera citación a indagatoria programada para la semana pasada. Por la misma razón tampoco prosperó la convocatoria de la acusada Alicia Trimarco, tesorera de la ONG y prima de la presidenta. El tercer imputado, el secretario Gastón Robles, pidió la postergación de la audiencia por un compromiso profesional previamente asumido: Bejas hizo lugar a la solicitud y lo citó para este miércoles. En el ínterin se presentó Betina Laguna invocando que era abogada de la Fundación dedicada a la asistencia de las víctimas de la trata y propuso usar el domicilio de esa entidad para las notificaciones: sucede que Susana Trimarco estaría radicada en Córdoba.
Como Brito salió de licencia por haber trabajado en la feria, el fiscal federal general Gustavo Gómez intervino en el caso y pidió la averiguación del paradero de Trimarco, lo que, según fuentes judiciales, implicaba involucrar a la Policía. Pero ayer Bejas rechazó ese requerimiento. En cambio, el juez intimó a Laguna para que en 24 horas indique si actúa como defensora de Trimarco e informe su domicilio real actualizado. En paralelo, Bejas libró oficios para obtener la última morada registrada de la imputada. En el Juzgado Federal N°1 aguardan el resultado de esas medidas para emitir una nueva citación o endurecer la búsqueda de la acusada.
En el entorno de Trimarco dijeron este martes que aquella tenía intenciones de presentarse a declarar y de explicar qué hizo con el dinero. En su momento, la presidenta de la ONG había reivindicado su inocencia y negado la imputación. Las fuentes consultadas no descartaron que Trimarco acuda “en cualquier momento” y sin aviso previo a los Tribunales federales de Las Piedras y Congreso.
El caso había estado parado durante siete meses a la espera de que la Cámara Federal de Apelaciones de Tucumán resolviese un conflicto de competencia entre Bejas y su par Fernando Luis Poviña (N°2): ambos alegaron que el proceso pertenecía al otro. Por fin el 28 de febrero, el vocal subrogante Hernán Frías Silva resolvió que la causa prosiga donde había empezado, en el Juzgado N°1. El origen de las actuaciones se remonta a una auditoría practicada por el Gobierno de Cambiemos que detectó que seis días antes del cambio de mando la cartera de De Vido giró el anticipo a Trimarco para que esta remodelara un jardín de infantes, entre otras obras. El fiscal Brito dijo que ello no había acontecido y que extistían pruebas suficientes para sospechar la presunta comisión del delito de defraudación en perjuicio del Estado nacional.