“Uno de los acusados me buscó antes de que lo detuvieran y cuando me encontró, me pidió perdón, me dijo que se les había ido la mano y que sólo querían recuperar las cosas que le habían robado”. Eso dijo la hija de Ezequiel Armando Gramajo (32 años), el hombre que murió por la golpiza que recibió en Villa 9 de Julio. Fue encontrado cerca de la medianoche del sábado 2 por su hija de 15 años, agonizando en la plaza del barrio, en avenida San Ramón al 800. La adolescente llamó a una ambulancia y de allí lo trasladaron al hospital Padilla, donde murió el lunes 4. Según el informe de los médicos, había recibido numerosos golpes en la cabeza. Las lesiones que presentaba serían compatibles con puntapiés y golpes de puño.
La hija de Gramajo declaró en cámara Gessell –es menor de edad- y contó que un grupo de hombres lo golpearon y lo dejaron abandonado. Tmbién contó que el sospechoso le comentó que “atraparon a su padre por los comentarios de los vecinos”.
José María Froio, de 37 años, fue el primer detenido. Es propietario de la casa donde supuestamente ingresó Gramajo a robar. Negó su participación en el hecho. Él y un familiar fueron imputados por homicidio agravado. Se enfrentan a una condena de 20 años.